/ jueves 24 de octubre de 2024

El toque femenino / ¿Y tú eres una mujer de alto valor? 

Las pláticas entre mujeres suelen ser reconfortantes y reveladoras además de picantes en algunos casos, ya que más de una vez descubrimos que los temores, frustraciones o deseos, son compartidos es decir no somos las únicas que experimentamos ciertas emociones sobre todo con respecto al futuro, la familia y el amor.

En días pasados platicando con un grupo de mujeres de cuarenta y más, resultó que todas las ahí presentes eran divorciadas así que queriendo o no, estaban de nuevo en el mercado de la soltería y es que Querétaro es uno de los estados donde el índice de divorcios va en aumento, por lo tanto abundan los solteros y solteras que en la mayoría ( ya que hay casos en que algunos prefieren no pensar en el amor) están en busca de reescribir su historia amorosa o como dice el titulo de una obra de teatro: “Busco al hombre de mi vida, marido ya tuve” y es que si, a veces lo que pareciera una derrota de la cual no te podrás levantar, se convierte en una oportunidad de descubrir una infinidad de puertas abiertas para conocer a nuevas personas e ideologías a veces compatibles con tus estándares de lo que debe ser la pareja ideal.

En este grupo de mujeres hubo una frase que se repitió al menos en 10 ocasiones, “Yo merezco encontrar a un gran hombre porque soy una Mujer de alto valor, la cual probablemente identifiques por sus siglas MAV. Es gratificante escuchar a mujeres seguras de sí mismas, de lo que desean y sobre todo que se consideran de alto valor, lo curioso es que en los comentarios de varias de ellas no concordaba mucho la clase de hombre que esperan encontrar siendo una mujer de alto valor con los lugares que frecuentan para lograrlo. Por lo tanto revisemos las características de una MAV sin olvidar que todas las mujeres somos valiosas simplemente por el hecho de ser nosotras.

Un punto importantísimo que define a una mujer de alto valor es que bajo ninguna circunstancia centra su felicidad en un hombre, una MAV, se quiere y se cuida en su alimentación, procura el equilibrio en su vida, trabaja en lograr su mejor versión, cuida lo que consume intelectualmente, es responsable de su salud mental y de su auto concepto, tiene claridad sobre sus objetivos personales, conoce perfectamente sus no negociables y los mantiene, que no está dispuesta a cambiar ya que generalmente van muy ligados a sus valores, como por ejemplo; aceptar infidelidades, mentiras o malos tratos, no busca desesperadamente a un hombre y cuando lo encuentra no lo persigue y asfixia como si este fuera el último sobre la faz de la tierra, no anda como dicen las abuelitas; con el vestido de novia en la cajuela ya que esa urgencia es detectable y en muchos casos hace que desaparezca el interés.

De esa plática me llamó la atención también, que algunas de ellas referían que acudían a bares o antros frecuentados por personas de su edad porque ahí podrían coincidir con personas afines y buscando revivir sus años de solteras, sin embargo las cosas han cambiado la edad no es la misma y seguramente el ambiente del lugar no será el adecuado para encontrar pareja pues está involucrada la música, el alcohol y quizá solo derive en amor de una sola noche, que al día siguiente provoque además de una resaca, una cruda moral que puede torturar la mente varios días.

Por lo tanto si tu, hombre o mujer que estás leyendo o viendo esta columna, pasas por esa etapa creo que es importante que te des un momento para pensar y proyectar lo quieres para los siguientes años de tu vida en cuanto al terreno del amor, sobre todo aceptar tu nueva realidad; la soltería, disfrutarla, analizar qué te llevó a esa ruptura que seguramente dolió pero dejó una gran enseñanza, y trabajar en tu crecimiento personal, sobre todo porqué una mujer de alto valor está lista para encontrar también un hombre de alto valor que la complemente para tener una relación sana y afectuosa que sume alegría y felicidad a su vida y no una relación tóxica que la sumerja en un bucle de ansiedad y celos. Recordemos que la mejor pareja es la que brinda paz y estabilidad y eso si, primero trabajamos en nosotras, pues será justo lo que atraeremos.


Las pláticas entre mujeres suelen ser reconfortantes y reveladoras además de picantes en algunos casos, ya que más de una vez descubrimos que los temores, frustraciones o deseos, son compartidos es decir no somos las únicas que experimentamos ciertas emociones sobre todo con respecto al futuro, la familia y el amor.

En días pasados platicando con un grupo de mujeres de cuarenta y más, resultó que todas las ahí presentes eran divorciadas así que queriendo o no, estaban de nuevo en el mercado de la soltería y es que Querétaro es uno de los estados donde el índice de divorcios va en aumento, por lo tanto abundan los solteros y solteras que en la mayoría ( ya que hay casos en que algunos prefieren no pensar en el amor) están en busca de reescribir su historia amorosa o como dice el titulo de una obra de teatro: “Busco al hombre de mi vida, marido ya tuve” y es que si, a veces lo que pareciera una derrota de la cual no te podrás levantar, se convierte en una oportunidad de descubrir una infinidad de puertas abiertas para conocer a nuevas personas e ideologías a veces compatibles con tus estándares de lo que debe ser la pareja ideal.

En este grupo de mujeres hubo una frase que se repitió al menos en 10 ocasiones, “Yo merezco encontrar a un gran hombre porque soy una Mujer de alto valor, la cual probablemente identifiques por sus siglas MAV. Es gratificante escuchar a mujeres seguras de sí mismas, de lo que desean y sobre todo que se consideran de alto valor, lo curioso es que en los comentarios de varias de ellas no concordaba mucho la clase de hombre que esperan encontrar siendo una mujer de alto valor con los lugares que frecuentan para lograrlo. Por lo tanto revisemos las características de una MAV sin olvidar que todas las mujeres somos valiosas simplemente por el hecho de ser nosotras.

Un punto importantísimo que define a una mujer de alto valor es que bajo ninguna circunstancia centra su felicidad en un hombre, una MAV, se quiere y se cuida en su alimentación, procura el equilibrio en su vida, trabaja en lograr su mejor versión, cuida lo que consume intelectualmente, es responsable de su salud mental y de su auto concepto, tiene claridad sobre sus objetivos personales, conoce perfectamente sus no negociables y los mantiene, que no está dispuesta a cambiar ya que generalmente van muy ligados a sus valores, como por ejemplo; aceptar infidelidades, mentiras o malos tratos, no busca desesperadamente a un hombre y cuando lo encuentra no lo persigue y asfixia como si este fuera el último sobre la faz de la tierra, no anda como dicen las abuelitas; con el vestido de novia en la cajuela ya que esa urgencia es detectable y en muchos casos hace que desaparezca el interés.

De esa plática me llamó la atención también, que algunas de ellas referían que acudían a bares o antros frecuentados por personas de su edad porque ahí podrían coincidir con personas afines y buscando revivir sus años de solteras, sin embargo las cosas han cambiado la edad no es la misma y seguramente el ambiente del lugar no será el adecuado para encontrar pareja pues está involucrada la música, el alcohol y quizá solo derive en amor de una sola noche, que al día siguiente provoque además de una resaca, una cruda moral que puede torturar la mente varios días.

Por lo tanto si tu, hombre o mujer que estás leyendo o viendo esta columna, pasas por esa etapa creo que es importante que te des un momento para pensar y proyectar lo quieres para los siguientes años de tu vida en cuanto al terreno del amor, sobre todo aceptar tu nueva realidad; la soltería, disfrutarla, analizar qué te llevó a esa ruptura que seguramente dolió pero dejó una gran enseñanza, y trabajar en tu crecimiento personal, sobre todo porqué una mujer de alto valor está lista para encontrar también un hombre de alto valor que la complemente para tener una relación sana y afectuosa que sume alegría y felicidad a su vida y no una relación tóxica que la sumerja en un bucle de ansiedad y celos. Recordemos que la mejor pareja es la que brinda paz y estabilidad y eso si, primero trabajamos en nosotras, pues será justo lo que atraeremos.