Con los resultados electorales, que recién se acaban de confirmar en Querétaro, el papel de oposición lo tendrá que jugar en ocasiones Morena y en ocasiones el PAN.

La situación ha quedado tan equilibrada que a nivel federal, tendremos presidenta de la República de Morena, con legislaturas federales lideradas por Morena, pero un gobierno del Estado de Querétaro, comandado por el PAN, pero una legislatura local con mayoría de Morena y los ayuntamientos en su mayoría gobernados por Morena y aliados, pero los de mayor densidad de población gobernados por el PAN.

Estamos ante una mezcla muy interesante de equilibrio de poderes, y hoy sabremos de qué están hechos los representantes y gobernantes a los que el pueblo les ha dado el mandato y la representatividad.

Lo que realmente necesitan los habitantes de este estado, estará en manos de políticos que tendrán que dejar de lado las pasiones partidistas y ponerse a gobernar para todos; esto quiere decir que tendrán que darle resultados a la gente que votó por ellos, pero sobre todo a los que no les dieron la confianza en las urnas.

Hoy estamos en Querétaro, por vivir una gobernanza como nunca antes, la habíamos tenido en la historia reciente de esta tierra queretana, que por muchos años en la narrativa cotidiana, se habla de un lugar lleno de oportunidades empresariales, de emprendimiento, desarrollo social y seguridad para sus habitantes.

En el último trimestre del año, sabremos qué rumbo tomarán las cosas y esperemos que la visión de los políticos no sea a corto plazo y solamente pensando en temas electorales del 2027.

DE REBOTE

En Morena no solamente hay ganadores, hay cuadros de los que nada se sabe respecto a su futuro político y sino pregunte aceptando a la diputada Andrea Tovar, qué pasará con los restantes actuales diputados locales del partido guinda. Así como llegaron, al parecer así se van.

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