/ martes 18 de junio de 2024

Neurona Ciudadana | Paternidad responsable y activa


Este domingo 16 de junio celebramos en nuestro país el Día del Padre, fecha importante para las familias mexicanas por lo que representa la figura paterna. Sin embargo, también es una oportunidad para reflexionar, analizar y tomar acciones bajo una visión femenina, para que los hombres que deciden ser padres, y los que ya lo son, participen activamente en la crianza de los hijos con responsabilidad, compromiso y conciencia.

Durante muchos años, la crianza de los hijos estuvo principalmente ligada a las madres, mientras que los padres, en su papel de “proveedores”, descartaban esa obligación. Está claro que las dinámicas familiares han cambiado radicalmente en las últimas décadas. Hoy, nos parecen inconcebibles aquellos roles rígidos a los que debían ajustarse mujeres y hombres.

Seguro recordarán esas ilustraciones de los años 50 que hacían una serie de recomendaciones a las mujeres para que su esposo fuera “feliz”. “Ten lista la cena, luce hermosa, sé dulce e interesante, arregla tu casa, hazlo sentir en el paraíso, prepara a los niños, minimiza el ruido, procura verte feliz, escúchalo, ponte en sus zapatos y no te quejes”, eran algunas de esas absurdas sugerencias que aparecían en la “Guía para ser una buena esposa” publicada en 1953. Aunque hoy en día parece una locura, aún existen muchas brechas considerables en los cuidados del hogar entre hombres y mujeres.

De acuerdo con el Censo 2020 elaborado por el INEGI, en México existen 35.2 millones de hogares. La Encuesta Nacional para el Sistema de Cuidados (Enasic) publicada en 2023 por este mismo organismo, detalla que las personas susceptibles de recibir cuidados en los hogares ascienden a 58.3 millones de personas. Aquí viene un dato revelador: de las personas responsables de proveer cuidados en el hogar, el 86.9% son mujeres y solo el 13.1% son hombres, lo que evidencia una gran brecha.

En este mismo sentido, el IMCO destacó que las mujeres dedican en promedio 40 horas a la semana al trabajo no remunerado, en comparación con las 15.9 horas a la semana que dedican los hombres. El INEGI considera que el trabajo doméstico no remunerado incluye actividades como la preparación y servicio de alimentos, limpieza del hogar, cuidado de ropa y calzado, mantenimiento, reparaciones menores, compras, pagos, trámites, así como la gestión y administración del hogar.

Datos oficiales señalan que en nuestro país, las tareas del hogar y de cuidados alcanzaron un valor económico de 6.8 billones de pesos en 2021, en donde las mujeres aportaron 2.6 veces más valor económico que los hombres por su trabajo no remunerado. Se estima que el valor económico total del trabajo no remunerado equivale al 26% del PIB nacional, superando sectores como el comercio (20%), las industrias manufactureras (18%) y los servicios inmobiliarios (10%).

Es crucial seguir insistiendo en la creación de un Sistema Nacional de Cuidados, que ayude a reducir la discriminación por maternidad, respalde la lactancia materna con horarios flexibles y salas adecuadas, y abogue por licencias de maternidad y paternidad que reflejen las responsabilidades compartidas y las necesidades familiares. En este sentido, el Banco Mundial considera que una mayor paridad en los permisos de cuidados generará una mayor participación femenina en la fuerza laboral y fomentará una paternidad más activa y responsable. Recordemos que en México, se otorgan 84 días de licencia por maternidad de manera obligatoria, mientras que las licencias de paternidad solo son de 5 días.

Con todo lo anterior, felicitamos a todos los padres en su día. Sin embargo, reiteramos el llamado a ejercer una paternidad comprometida que beneficie la construcción de un tejido social más sólido y equitativo.


*Presidenta de la Comisión de Bienestar e Inclusión Social de Coparmex Nacional



Este domingo 16 de junio celebramos en nuestro país el Día del Padre, fecha importante para las familias mexicanas por lo que representa la figura paterna. Sin embargo, también es una oportunidad para reflexionar, analizar y tomar acciones bajo una visión femenina, para que los hombres que deciden ser padres, y los que ya lo son, participen activamente en la crianza de los hijos con responsabilidad, compromiso y conciencia.

Durante muchos años, la crianza de los hijos estuvo principalmente ligada a las madres, mientras que los padres, en su papel de “proveedores”, descartaban esa obligación. Está claro que las dinámicas familiares han cambiado radicalmente en las últimas décadas. Hoy, nos parecen inconcebibles aquellos roles rígidos a los que debían ajustarse mujeres y hombres.

Seguro recordarán esas ilustraciones de los años 50 que hacían una serie de recomendaciones a las mujeres para que su esposo fuera “feliz”. “Ten lista la cena, luce hermosa, sé dulce e interesante, arregla tu casa, hazlo sentir en el paraíso, prepara a los niños, minimiza el ruido, procura verte feliz, escúchalo, ponte en sus zapatos y no te quejes”, eran algunas de esas absurdas sugerencias que aparecían en la “Guía para ser una buena esposa” publicada en 1953. Aunque hoy en día parece una locura, aún existen muchas brechas considerables en los cuidados del hogar entre hombres y mujeres.

De acuerdo con el Censo 2020 elaborado por el INEGI, en México existen 35.2 millones de hogares. La Encuesta Nacional para el Sistema de Cuidados (Enasic) publicada en 2023 por este mismo organismo, detalla que las personas susceptibles de recibir cuidados en los hogares ascienden a 58.3 millones de personas. Aquí viene un dato revelador: de las personas responsables de proveer cuidados en el hogar, el 86.9% son mujeres y solo el 13.1% son hombres, lo que evidencia una gran brecha.

En este mismo sentido, el IMCO destacó que las mujeres dedican en promedio 40 horas a la semana al trabajo no remunerado, en comparación con las 15.9 horas a la semana que dedican los hombres. El INEGI considera que el trabajo doméstico no remunerado incluye actividades como la preparación y servicio de alimentos, limpieza del hogar, cuidado de ropa y calzado, mantenimiento, reparaciones menores, compras, pagos, trámites, así como la gestión y administración del hogar.

Datos oficiales señalan que en nuestro país, las tareas del hogar y de cuidados alcanzaron un valor económico de 6.8 billones de pesos en 2021, en donde las mujeres aportaron 2.6 veces más valor económico que los hombres por su trabajo no remunerado. Se estima que el valor económico total del trabajo no remunerado equivale al 26% del PIB nacional, superando sectores como el comercio (20%), las industrias manufactureras (18%) y los servicios inmobiliarios (10%).

Es crucial seguir insistiendo en la creación de un Sistema Nacional de Cuidados, que ayude a reducir la discriminación por maternidad, respalde la lactancia materna con horarios flexibles y salas adecuadas, y abogue por licencias de maternidad y paternidad que reflejen las responsabilidades compartidas y las necesidades familiares. En este sentido, el Banco Mundial considera que una mayor paridad en los permisos de cuidados generará una mayor participación femenina en la fuerza laboral y fomentará una paternidad más activa y responsable. Recordemos que en México, se otorgan 84 días de licencia por maternidad de manera obligatoria, mientras que las licencias de paternidad solo son de 5 días.

Con todo lo anterior, felicitamos a todos los padres en su día. Sin embargo, reiteramos el llamado a ejercer una paternidad comprometida que beneficie la construcción de un tejido social más sólido y equitativo.


*Presidenta de la Comisión de Bienestar e Inclusión Social de Coparmex Nacional