El aguamiel es una bebida mexicana tradicional y no solo es deliciosa en su sabor y consistencia, sino también tiene propiedades medicinales que la convierten en un elixir. También se le conoce como clachique, urapi o tlachique y se extrae principalmente del maguey pulquero, así lo platicó Buena Ventura Sánchez, originaria de la comunidad de Pathé en el municipio de Cadereyta de Montes, quien hace más de 20 años junto con su esposo se dedican a recolectar esta bebida para después venderla en las comunidades aledañas.
El aguamiel se ha extraído desde el año 200 a.C. en diferentes partes de nuestro país y esto es sabido Gracias a que han sido encontrados raspadores de piedra utilizados para extraer la bebida.
“Su consistencia es melosa y posee un sabor dulce que va cambiando poco a poco después de que lo extraemos del maguey con ayuda del acocote, por eso sí quieres disfrutar de su sabor se recomienda beberlo al instante, sin embargo si lo deja fermentar podemos obtener otra deliciosa bebida que es el pulque”, platicó Ventura.
Para obtener el jugo, el maguey tiene que tener al menos 8 años de madurez, es ahí cuando se le hace un orificio en su centro, después con un raspador del rasca hasta llegar y poder quitar el gabazo y es en ese momento el aguamiel comienza a brotar.
“Raspamos tres veces al día y muchas veces depende del maguey cuanta aguamiel se produzca, en promedio llegan a ser dos litros por planta”, dijo.
Según datos del Diccionario Enciclopédico de la Medicina Tradicional Mexicana, él aguamiel tiene numerosas propiedades medicinales como que evita infecciones provocadas por lesiones de cualquier tipo, lavar heridas infectadas, alivia padecimientos renal-urinarios, es útil como diurético y posee propiedades antibióticas.