El Templo Jesús de Nazareth, fue el escenario para que el pequeño Alan Francisco Gómez Barrera de siete meses de edad, se incorporara a la vida de Dios como verdadero Cristiano al ser bautizado.
Sus padres Mariana Barrera Castillo y Héctor Bogar Gómez Camargo, así como su madrina Alejandra Barrera Castillo, aceptaron el compromiso de cuidarlo, guiarlo y aconsejarlo durante toda su vida, para que sea un católico comprometido, responsable y un ser humano excepcional.
Luego de la celebración religiosa la familia Gómez Barrera y los abuelos del festejado, Magdalena Castillo Rangel, Francisco Barrera Ríos, Ernesto Gómez Nieto y Juanita Camargo Osornio se trasladaron al salón de fiestas el Ébano, lugar donde los esperaban familiares, amigos e invitados para festejar por este solemne acontecimiento.