El agua de jamaica es de las más consumidas en nuestro país y no solo para calmar la sed y refrescarnos, sino que también para
depurar el cuerpo y aunque a muchos no les guste tanto su sabor ácido, es ideal consumirla sin azúcar para conservar sus propiedades.
Esta infusión tiene la capacidad de tratar la presión arterial y el colesterol alto, acelerar el metabolismo, ayudar a la pérdida de peso saludable y gradual; es rica en vitamina C, minerales y antioxidantes que ayuda al tratamiento de enfermedades hepáticas y ralentiza el crecimiento de células cancerosas.
Además de su gran e inigualable sabor, la jamaica también posee propiedades diuréticas por su vitamina C, estimulando la actividad del sistema inmune y protege de posibles resfriados o gripes. También se puede consumir como té para ayudar a disminuir molestias causadas por la fiebre, ya que posee un gran efecto de enfriamiento.
Olvídate del molesto dolor menstrual, también ayuda a restaurar el equilibrio hormonal, reduciendo síntomas como cambios de humor, depresión y comer en exceso mientras estás en tu periodo.
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Debido a que tiene propiedades diuréticas, esta bebida regulariza la evacuación y las deposiciones; también se usa para tratar el estreñimiento, provocando pérdida de peso.