El quincuagésimo aniversario de la boda entre Javier Zúñiga Ramírez y Hortensia Santiago Altamirano se celebró con una comida tradicional mexicana teniendo mole rojo y arroz como plato principal, el cual deleitó los paladares de sus casi 300 invitados que se congregaron en el salón Maraf para compartir con la pareja la inminente alegría de su perpetuo amor.

Conteniéndose las lágrimas por haber llegado a cumplir lo que ambos describieron como un sueño, Javier Zúñiga y Hortensia Santiago afirmaron en entrevista para el Diario de Querétaro, que estar ahí “sanos y enteros” era su mayor razón para estar agradecidos.

“Nos casamos un seis de octubre de 1968 y después de rogarle a Dios que nos permitiera llegar juntos a nuestras bodas de oro, finalmente hoy la plegaria se hizo realidad” dijeron emocionados.

Engalanados en vestimentas tradicionales del Istmo de Tehuantepec, región del estado de Oaxaca y que vio nacer a Hortensia Santiago, el legendario matrimonio aprovechó los primeros instantes de la reunión para inmortalizarla con fotografías en las que se retrataron con sus cuatro hijos Javier, Mayra, Ricardo y Denisse, además de sus seis nietos Andrea, Javier, diego, Karen, Frida y Emiliano, con los que más tarde también compartieron la pista de baile.