Judith Martínez es una mujer que ha dedicado gran parte de su vida a las ayudas humanitarias desde diferentes trincheras, en exclusiva para Diario de Querétaro la también presidenta de la Fundación “Red Voz por la Paz” en México nos abre su corazón para platicar de la pasión que siente al realizar su noble trabajo.
La Filantrópica recuerda que desde el 2011, cuando se encontraba en el movimiento eclesial internacional perteneciente a la Iglesia católica Regnum Christi, y pertenecía a las familias misioneras tenía a su cargo 33 comunidades, fue así que inició parte de su apostolado donde apoyó a varias familias y como ella dice “lo hice también con la mía, pues los valores que les inculcamos a nuestros dos hijos son invaluables”.
De sus aciertos que tuvo con esta encomienda, fue congregar a varias familias, no sólo de Querétaro, también de Michoacán, Morelos, entre otros estados y aunque el proyecto es eclesiástico logró que el gobierno estatal en ese entonces comandado por Pepe Calzada Rovirosa se interesara y a través del DIF encabezado por Sandra Albarrán de Calzada vincular varios apoyos para familias vulnerables.
En su camino encontró a uno de los grandes promotores de la paz a nivel mundial Odino Faccio, quien es reconocido por darle vida a los escritos de San Juan Pablo Segundo, para convertirlo en el “Himno de la Paz” a encomienda de la Santa Sede y la segunda parte por asignación directa de su Santidad el Papa Francisco.
En su incansable lucha Martínez ha trabajado porque Querétaro se encuentre en la cúspide internacionalmente y sea nombrada “Ciudad de Paz” donde Monseñor Faustino Armendáriz, Alfredo Botello y Francisco Domínguez son nombrados embajadores, por las investiduras que cada uno lleva.
Para finalizar la también empresaria, conversó acerca de su último proyecto, con el cual ya lleva dos años, consistente en acercar a las personas a tener una mejor salud y a través de ello empoderarse financieramente con un producto que como ella dice “no es milagro” pero traspasa fronteras y cambia la vida de quien lo conoce.