Las Quintillizas Reyes Quistián ya llegaron a los quince años de vida

Han pasado 15 años desde que Diario de Querétaro dio la noticia del nacimiento de las quintillizas Reyes Quistián; un momento bendecido para la familia y de alegría para los queretanos, el saber que nacieron bien en el Instituto Mexicano del Seguro Social: Alba, Regina, Ananké, Montserrat y Dominique, respiraron por primera vez el 25 de marzo de 2004.

Hoy hicimos una recopilación de su vida, en el preciso momento de sus quince años de vida, ahora conocemos sus cualidades, habilidades y gustos; son estudiantes de secundaria, son atletas y medallistas nacionales. Siempre han contado con el amor y el apoyo de sus padres, de sus abuelos, familiares y amigos.

En entrevista para Diario de Querétaro, sus padres Alba Luz Guadalupe Quistián Silva y Eduardo Alfonso Reyes Vega, nos platicaron cómo ha sido su vida desde que la noticia llegó. Contrajeron matrimonio el 14 de julio del 2000 y planearon ser padres 3 años después pero como Alna era irregular en su periodo, le inyectaron inductores de ovulación, lo que permitió a los 3 meses estar embarazada.

“En el primer ultrasonido sólo se veían 4 lucecitas, nos dijo el doctor que no nos preocupáramos, ya que el cuerpo de la mujer es muy sabio y desecharía los que no fueran viables. Pero en el ultrasonido siguiente no eran 4, sino 5 lucecitas, y desde ese momento supimos que serían 5 bebés los que venían en camino”, relató Eduardo.

Cuenta que tuvieron mucho miedo e incertidumbre, porque como cualquier matrimonio esperaban de 1 por 1, y en este no teníamos idea como le íban a hacer para cuidarlas, atenderlas, mantenerlas. Pero con el respaldo de sus familias todo empezó a fluir, y también con la atención del ginecólogo, dijo que les dio mucha seguridad.

Llegó el día y Alba Luz estuvo internada una semana antes para que las niñas nacieron a través de cesárea con 31 semanas de gestación, comenta Eduardo que no pudo estar presente en el nacimiento de sus hijas ya que el director del Hospital le informó que por cada niña tendría 1 pediatra, 1 enfermera y 2 ayudantes, además del ginecólogo de mi esposa, el anestesiólogo y los jefes de ginecología y pediatría del lugar.

Nacieron el 25 de marzo de 2004, la primera en nacer fue Alba a las 9:32; después Ananké, Regina, Montserrat y a las 9:37 Dominique.

Recuerda que Alba y Dominique fueron las más graves, ya que tragaron líquido amniótico al nacer, por lo cual, necesitaron utilizar respiradores para estabilizarlas. “Estuvieron hospitalizadas varias semanas en el área de terapia intensiva de neonatos, pero fueron dadas de alta como iban alcanzando peso y talla para llevarlas a casa, en donde ya estábamos esperándolas con mucha emoción”.

Los padres aseguran que la vida les cambió radicalmente, ya que de ser 2, pasaron a ser 7 en la casa. “Mi esposa tuvo que renunciar a su trabajo, era entrenadora de atletismo y fútbol para dedicarse en vida y alma a sus hijas, junto a mis suegros y mis papas que llegaron de otros estados para vivir con nosotros y ayudarnos con todo el trabajo que teníamos en casa”.

Los abuelos maternos; Amparo Silva Robles y Pedro Quistian Uresti (q.e.p.d.) y los paternos Consuelo Vega Juárez y Eduardo Reyes Pimentel, fueron parte de este crecimiento feliz.

Cuenta que las actividades eran a la hora de la comida, la bañada la arrullada, la estimulación temprana porque fueron prematuras, inclusive cuando las niñas estaban dormidas mi esposa no paraba, ya que era cuando podía asear la casa, hacer la comida, lavar ropa, los platitos, biberones, y más”.

“Y en mi caso yo me iba a trabajar, ya que cuando ellas nacieron yo tenía 2 empleos, es entrenador deportivo, pero por las mismas necesidades que había tuve que buscar más opciones, y hubo un tiempo que tuve 4 trabajos, actualmente tengo la fortuna de contar con 3, y después de mis jornadas laborales llegaba a la casa a seguir con las tareas que se estuvieran realizando en ese momento”, dice el papá. “Así de estresante fueron aproximadamente los 2 primeros años de vida de las bebes”.

Las quintillizas desde su primera infancia han practicado varios deportes, iniciaron con natación, después Tae kwon do, baloncesto, y hasta artes marciales mixtas para que aprendieran a defenderse pero al finalizar la primaria y durante la secundaria, ya que actualmente van en 3ro de secundaria, una práctica atletismo y ha logrado asistir a eventos estatales regionales y nacionales, 3 de ellas han practicado tenis de mesa, las 3 han ido a eventos nacionales, 2 son actualmente medallistas de olimpiada nacional y 1 de ellas acaba de representar en el pasado mes de febrero a nuestro país en un campeonato centroamericano sub 15 se tenis de mesa logrando traer 3 medallas. Un gran logro para ser su primer evento internacional.

Montserrat no le gusta mucho el deporte y ha manifestado que lo que más le llama la atención es cantar, “pero lamentablemente no hemos podido apoyarla todavía en esta parte por diferentes motivos”, agregó su padre.

Las medallistas de Olimpiada Nacional 2018 en tenis de mesa son Regina que logró ser doble medallista las 2 de bronce y Dominique con 1 de bronce; Dominique fue en el pasado mes de febrero seleccionada nacional en el campeonato Centroamericano sub. 15 de la especialidad, logrando muy buenos resultados en su 1er evento internacional, ya que logró para México 3 medallas de bronce. Ananké es la actual campeona estatal de la prueba Heptatlón en el deporte de atletismo.

El sábado pasado, asistimos a la fiesta de quince años de estas jovencitas quienes lucieron esplendorosas en vestidos muy juveniles y compartieron el momento con sus amigos y familiares que son muchos.