Aún en medio de la pandemia por la que atravesamos mundialmente, los diseñadores se pusieron a trabajar y las tendencias no se hicieron esperar con detalles extraídos de la naturaleza, como flores, plantas e insectos, y el print animal, que ya lleva algunos años imponiéndose en la moda, aunque este año cobrarían ventaja los estilos leopardo y las cebras.
Todo apunta a que también regresan algunos estilos de los 80 y 90, con hombreras y mangas globo, diseños exagerados que pretenden mostrar un look atrevido, los pantalones anchos de la época de los 70 se imponen, tanto en jeans como en tela de paño y que decir de las clásicas e indispensables minifaldas estilo a cuadros que cobran importancia nuevamente, y se combinarían con blusas, jerseys de colores, chalecos, medias de rejilla, medias deportivas o con zapatos de tacón, incluso.
“Los estilos básicos con cortes rectos para mí nunca serán un error a la hora de vestir (sastrería holgada) pero nunca está demás las prendas que añadan más estilo al outfit. Definitivamente la ropa retro y vintage sirven exactamente para esto, esta tendencia viene tomando fuerza desde el año anterior y seguro seguirá creciendo este año, porque además es una opción amigable con el medioambiente”, dice la diseñadora Lía Cevallos, de la tienda de moda “Anacleta Coqueta”.
La cuarentena impuso el estilo Comfy, que busca la comodidad en la vestimenta, debido a que por las condiciones sanitarias, es necesario permanecer más tiempo en casa. Así, por ejemplo, se recomiendan los chándals, joggings, sudaderas y chaquetas para hacer deporte. Mientras, para salir, lo ideal sería hacerlo con pantalones que se atan con gomas y ropa deportiva que va con trajes, chaquetas o vestidos.
“Regresan prendas como los chalecos tejidos para usarlos con un camisas maxis o combinarlo con cualquier tipo de blusa. “Cinco prendas son indispensables para este año: chaleco tejido, pantalón acampanado en pana, chaqueta deportiva retro (70s), saco oversized a cuadros, chándal”, agrega Cevallos.
Otras prendas prometedoras son las gabardinas, que generalmente son utilizadas para los fríos intensos, pero que por consecuencia del Covid-19, han sido consideradas también como prendas de protección. Los estilos clásicos con colores ‘tierra’ seguirán siendo las más utilizadas, acompañadas de cinturones.
El estilo charol también está entre las tendencias de este año. Las propuestas se han visto en leggings, bolsos y vestidos, especialmente.
En cuanto a las combinaciones del vestuario con las mascarillas, lo recomendable es que éstas sean de colores enteros y sólidos, y que estén en buen estado, para una mejor presentación.
“Sin duda las mascarillas son parte de nosotros hoy, y es muy importante sobre todo que las mascarillas siempre se encuentren en buen estado. Personalmente, prefiero las mascarillas en colores enteros, sólidos, ya que son mas fáciles de combinar. Me encanta la gama de grises”, menciona la afamada diseñadora.
En cuanto a los colores, de acuerdo al anuncio del Pantone Color Institute, en este año serán tendencia los colores Illuminating (amarillo) y Ultimate Gray (gris), evocando a resiliencia y esperanza. Los dos pueden combinarse perfectamente, y también pueden acompañarse con blanco y negro.
El color rosa también se mantiene, aunque en menor intensidad. El nude es otro color que permite rejuvenecer a la persona, por lo que también será muy utilizado, especialmente en vestidos.
En cuanto a accesorios, las recomendaciones de la tienda de moda ‘Anacleta Coqueta’, son las siguientes: bucket hats, pañuelos ilustrados, aretes falsos (que se usan en las diferentes partes de la oreja), scrunchies en diferentes tamaños y colores.
(Con información de El Mercurio y Vogue)