Uno de los tratamientos estéticos que se han hecho populares para quienes se someten a cualquier cirugía estética, son los masajes linfáticos brasileños, pero aunque muchas páginas principalmente de Facebook los ofertan, hay que tener cuidado de quien lo realiza pues según la experta Kris Gallegos, ponerse en manos de alguien que no esté certificado para este procedimiento postquirúrgico puede traer graves consecuencias.
Los masajes de drenaje linfático brasileño se recomiendan antes de la cirugía plástica con el fin de desintoxicar el cuerpo y ayudarlo a pasar de la mejor manera por este procedimiento, cuando ya se realizó la intervención quirúrgica es indispensable que se practique este masaje ya que estimula el sistema linfático ayudando a transportar líquidos y toxinas a ser expulsados de manera rápida y eficaz, promoviendo así una recuperación más rápida y reduciendo el riesgo de complicaciones como edema, también mejora la circulación y puede aliviar la incomodidad postoperatoria al favorecer la curación del tejido circundante, mencionó Kris Gallegos para entrevista a Diario de Querétaro.
"Realizarse el masaje de drenaje linfático brasileño también evita la aparición de fibrosis que es la cicatrización anormal de los tejidos, los cuales se engrosan y producen endurecimiento en la zona tratada, creando protuberancias o bultos. La fibrosis genera una apariencia antiestética", refirió la fisioterapeuta.
"Todo esto se puede evitar cuando se realiza está técnica de forma adecuada, cabe mencionar que para una cirugía plástica es vital la selección del cirujano y ver qué sea certificado, ;yo atiendo a pacientes de diferentes médicos, pero en mi opinión uno de los mejores de la ciudad y que recomiendo ampliamente es el cirujano plástico Fabián Colmeneros Córdoba en Querétaro, por ello recomiendo que planifiquen su cirugía y todos los gastos que conlleva, no se dejen llevar por charlatanes que atentan contra la salud", explicó Kris Gallegos.
Otra de las importancia del también llamado masaje “Brazilian Touch” es que este debe ser cien por ciento manual y su principal objetivo es estimular el drenaje natural de los ganglios linfáticos para eliminar los desechos y toxinas del cuerpo, "quien lo hace con aparatología definitivamente no sabe y puede ocasionar un daño severo al paciente", aseguró la experta.
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Aunque este procedimiento no es invasivo hay restricciones de quién puede someterse a él, por lo que no es recomendable para personas con infecciones agudas, inflamaciones de consideración, edemas por insuficiencia cardíaca, flebitis o tromboflebitis.
Como recomendación se puede comer avellanas, semillas de calabaza y almendras, pues son excelentes opciones que ofrecen beneficios específicos para el sistema linfático. Estos alimentos contienen antioxidantes, grasas saludables, fibra y fitoquímicos que ayudan a eliminar las toxinas y promover la salud de los ganglios linfáticos.