El primer día del mes de la luna más bella fue el elegido porlos queretanos Carmina Zamora Boiles y Santiago Dunhe Ayala paraunir sus vidas en sagrado matrimonio en una ceremonia religiosa quereunió a un sinfín de invitados especiales, entre los quedestacaron familiares y amigos de la pareja.
Los novios arribaron al templo de San Agustín justo cuando elatardecer se esfumó del cielo, acompañados por sus padres, Maríadel Carmen Boiles y Héctor Zamora, por parte de Carmina y, EnriqueDunhe y María Esther Ayala, por parte Santiago. Así mismo por suspadrinos de velación, Mariana y Enrique Dunhe, y un cortejonupcial que acompañó a la pareja ante el altar.
De la mano de su padre, Carmina entró al recinto con un vestidoen color blanco que le ceñía su figura, misma que fue cubiertapor un velo. Por su parte, acompañado de su madre, Santiago fueel primero en llegar al altar, quien esperaba emocionado la entradade su prometida.
Con la bendición de Dios padre, la ahora pareja de esposos, seprometieron cuidarse en la salud y enfermedad, pero sobre todo sejuraron amor eterno ante los testigos que presenciaron el enlacenupcial. Para finalizar la ceremonia, los novios sellaron sucompromiso con un romántico beso, para salir del templo de lamano, como marido y mujer.
Posterior a la ceremonia se realizó una celebración que tuvolugar en La Bartola, donde arribaron todos los invitados que hancompartido risas y momentos en los cuatro años de relación queCarmina y Santiago pasaron, antes de darse el –si quiero-.