Ahora con el Covid-19 donde los deudos del fallecido no tuvieron ni la suerte de despedirse, la gente busca la forma de inmortalizarlos, esto a través de osos de peluche que dan consuelo y tranquilidad, por lo que buscan al diseñador poblano que radica hace más de15 años en Queretano, Alfredo Gómez Morante para que con la prenda tengan un pedacito del recuerdo de su ser amado.
“Mis clientes me lo piden en busca de esa paz, incluso dicen, los ositos tienen el aroma de quien perdió la vida y su esencia; es curioso, pero cada quien puede ver la expresión diferente del peluche, creo que es el anhelo de querer tener nuevamente a su familiar”, dijo.
La tradición de elaborar los peluches con prendas, es de hace ya varios años, comentó que no es nuevo, cuando falleció su madre hace 10 años, quiso recordarla, tenerla con él y de un camisón que siempre utilizaba, vistió su oso y lo conservó siempre a su lado, “cuando me siento solo o triste lo abrazo buscando el consuelo de mamá” .
Alfredo Gómez Morante, diseñador textil egresado de la Universidad Ibero desde hace 15 años, inició creando cojines exclusivos y uno de ellos era un osito, pero fue tanto el impacto, que la gente comenzó únicamente a pedirle ese peluche; cuenta que su mamá le aconsejo, hacer esa figura, finalmente dejó atrás los famosos cojines. Pero creativo como es Gómez Morante, decidió ponerles “Ki” al tierno muñequito, que en Maya significa cariñoso, y se entregan con un certificado de adopción.
El diseñador nos cuenta que cada año expone en la Feria Internacional de Querétaro y ahí vende su colección de osos decembrinos que es exclusiva de la temporada; gracias a la excelente calidad de su producto mucha gente lo busca ya sea en su casa o nuevamente en su stand, que por razones que ya sabemos este año no abrió sus puertas.
Según los expertos en tanatología, el osito es el comienzo del proceso de duelo, principalmente el de la aceptación, “hay familias que se quedaron con rencores, con ganas de decirle cuanto amaban a su familiar o simplemente abrazarlo muy fuerte y es ahí donde comienza el aceptar que no está, pero que se da una oportunidad de hablar lo que se calló por muchos años, tal vez toda una vida, por eso la importancia de mostrar nuestros sentimientos a cada momento y no esperar hasta que a quien amamos se vaya” dice Marta Fernández psicóloga especialista en pérdidas.