Todos hemos entonado la melodía característica para romper la piñata en celebraciones o posadas, y ahora que ya se acerca el momento de compartir en familia y seres queridos las fiestas decembrinas es una tradición que no puede faltar, esta se originó desde la época de la colonia, y por supuesto no puede faltar la forma original y tradicional en México, con 7 picos, que según el simbolismo católico adoptado en la Nueva España, estos picos representan los pecados capitales: lujuria, ira, soberbia, envidia, avaricia, pereza y gula; que con sus colores vivos y adornos seduce el alma inocente para llevarla al pecado. La persona con los ojos vendados representa al creyente que con la virtud teologa de la fe vence al pecado recuperando el don sobrenatural de la gracia representados por la caída de frutas y dulces.

Astrid Razo forma parte de esta hermosa tradición mexicana gracias a su talento y creatividad al crear piñatas de manera artesanal, es fundadora de “Piñatas Endulzarte” hace ya varios años, negocio artesanal exitoso en el que ella se encarga de todo el proceso de las piezas con materiales como cartón, papel china y engrudo,obteniendo así modelos únicos de acuerdo al gusto de sus clientes y festividad para la que es requerida;crea piñatas con colores vivos, pasteles y de diferentes tamaños y formas.

Realiza alrededor de 180 piñatas anualmente, tardando aproximadamente un día en cada una; cuenta que la parte que más disfruta al momento de crear es darle vida a su trabajo y seguir formando de parte de esta cultura.