Hablar de Querétaro es traducir a un recorrido por los pasajes más importantes de la historia en México, tradición, cultura, arte, gastronomía y con una oferta vitivinícola a la altura de cualquiera, tal vez de ahí el slogan que se ha vuelto viral “En Querétaro encontré México”.
Hace unos días se llevó a cabo la segunda edición del Festival del Vino Queretano impulsado por la Secretaría de Turismo del Estado y el Clúster Vitivinícola, presentando la tercera edición del Vino Q, el cual es elaborado por todas las bodegas queretanas contando con un mismo sello y sabor.
Según Eusebio Goyeneche, presidente del Clúster Vitivinícola, este ejemplar es un vino limpio y brillante de capa media, tonalidades rojo granada con matices carmín. Además de ser el fruto del esfuerzo de todos los productores que se han unido por atraer más al enoturismo al estado, siendo ya la segunda actividad económica más importante de la región.
Liliana Cedillo gerente del CVQ mencionó que este es un modelo económico de trabajo colaborativo para apoyar la competitividad y está conformado por 30 productores de bodegas queretanas, siendo el único que hay en el país.
Durante el festival viñedos como San Juanito, Puerta de Lobo, Viñedos Polo, Freixenet, La Redonda, entre otros participaron en la exhibición y venta de vinos de primer nivel, con catas y maridaje por demás interesantes que conjugan el sabor del vino con la gastronomía típica del estado.
Mole rosado, dulce de xoconostle, queso de cabra y una gran variedad de sabores fue lo que los chefs de la Universidad IGES al mando de su directora Olivia González de Alegría, los sommelier de las casas vitivinícolas y los mismos representantes de queserías de la región presentaron para hacer vibrar los paladares de los visitantes con una explosión de sabores y texturas por demás interesantes.
La tradicional Ruta del Queso y el Vino en Querétaro se ha convertido en un escaparate para que más turistas acudan al estado y a lo que los expertos enólogos han catalogado como una de las mejores gracias a la variedad de productos, mostrando el paisaje típico del semidesierto encontrando en el camino todo un paraíso gracias a las diferentes vegetaciones, climas y todo lo que esta tierra bendita ofrece.