Llenos de amor llegaron hasta la iglesia de San Agustín la pareja conformada por Grisell Granados y Orlando Orozco, para convertirse en marido y mujer ante los ojos de Dios.
Acompañados de sus padres los señores, Malully Hernández y Sergio Orozco por parte del novio, y María Cruz y Juan Antonio Granados Hernandez por parte de ella, los novios fueron recibidos por el presbítero oficiante quien les dio una cálida bienvenida y les habló acerca del compromiso que estaban adquiriendo, exhortándolos a formar una familia con amor, comunicación, respeto y valores, para una vez llegados los hijos, sean ejemplo de vida.
Una vez concluida la ceremonia religiosa y después que Grisell ofreciera su ramo de novia a la Santísima Virgen María, los ya esposos salieron del recinto rumbo al atrio donde ya eran esperados en medio de la algarabía de sus invitados.
Los novios se trasladaron a la Hacienda La Solariega, la cual lució exquisitamente decorada, donde entre aplausos y felicitaciones por parte de sus poco más de 200 invitados Grisell y Orlando saludaron personalmente, para posteriormente compartir la sal y la pimienta con ellos.
Durante el delicioso banquete ofrecido por Querétaro Gourmet, mismo que fue preparado especialmente para la ocasión, brindaron con selectos vinos y destilados por la felicidad del nuevo matrimonio Orozco Granados, augurándoles una vida plena y repleta de bendiciones, todo amenizado por las notas de Mariachi Los Rancheros Queretanos.
Tras el vals, el cual fue por demás emotivo, los jóvenes invitaron a los presentes a romper la pista y sacar sus mejores pasos de baile, con el Grupo Jaleo, el cual puso el toque para continuar disfrutando del momento.
Finalmente los novios se despidieron para iniciar su viaje de luna de miel donde seguirán refrendando el gran amor que se tienen.