Los primeros turistas alemanes autorizados a disfrutar del sol en el archipiélago de Baleares llegaron este lunes en el marco de un programa piloto, una semana antes de que España reabra sus fronteras el 21 de junio.
Tras despegar al alba desde Dusseldorf, 180 alemanes aterrizaron un poco antes de las 11 horas en el aeropuerto de Palma, en la isla de Mallorca, la mayor del turístico archipiélago mediterráneo.
Forman parte de un grupo de 11.000 alemanes con permiso para disfrutar de Baleares a partir de este lunes.
"Estamos muy contentos de estar aquí. Adoramos Mallorca, venimos varias veces al año", dijo a su llegada a la AFP George Kasbach, venido de los alrededores de Colonia.
"Vimos el número de personas enfermas (de covid-19) en Mallorca y actualmente hay muy pocas", indicó, afirmando sentirse "seguro".
La llegada de estos primeros turistas extranjeros a España se inscribe en un programa piloto para reactivar el turismo, pilar de la economía española que representa un 12% de su PIB, pactado entre las autoridades regionales de Baleares y los turoperadores.
El plan de despliega una semana antes de la apertura de las fronteras de España con los países de la Unión Europea. Los pasos terrestres con Portugal se abrirán el 1 de julio, tal y como había establecido el gobierno de Pedro Sánchez.
Esta reapertura fronteriza coincidirá con el fin de las restricciones a la movilidad en España, uno de los países más golpeado por la pandemia del coronavirus, con más de 27.000 muertos.
Este lunes Galicia (noroeste) se convirtió en la primera región en concluir el desconfinamiento y entrar en la llamada "nueva normalidad", con obligatoriedad de uso de mascarillas hasta que se encuentre una vacuna.
Bajo un estricto protocolo sanitario, los primeros turistas alemanes llegados a Balares deben someterse a un control de temperatura a su llegada al aeropuerto y las autoridades les harán un seguimiento telefónico para verificar si presentan síntomas de covid-19.
Estarán exentos de la cuarentena impuesta a toda persona llegada a España desde el 15 de mayo, una obligación que será levantada totalmente el 21 de junio con la reapertura de fronteras.
Mallorca constituye un destino muy preciado por los alemanes, al punto de que la conocen como la decimoséptima región de su país.
Unos 4,5 millones de alemanes visitaron la isla en 2019 para disfrutar de sus playas idílicas y sus noches de fiesta.
Impedidos de viajar a sus residencias secundarias en Baleares por el cierre de fronteras, numerosos alemanes elevaron en semanas pasadas duras protestas contra las autoridades españolas.
Además de Mallorca, el archipiélago incluye también a Ibiza y Menorca, así como otras pequeñas islas.
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