Hoy celebramos a los abuelos, un día lleno de magia por lo que significan estos seres especiales en nuestras vidas, herederos de sabiduría y experiencia, esa que solo se consigue a través de los años y que en esta nueva era dejaron de ser las clásicas personas de la tercera edad que se recostaban en un sillón a ser solo espectadores de la vida.
Lugares como la Casa del Jubilado y del Pensionado del Gobierno del Estado, promueven y dignifican la vida de los adultos mayores, que hoy en día dejaron de ser espectadores para continuar viviendo y viviendo al máximo.
En el lugar dan todo tipo de talleres, siendo poco más de 30 actividades las que se imparten de lunes a viernes y van desde clases de zumba, yoga, manualidades, cocina, hasta talleres como el de Costumbres queretanas y paseos conventuales, impartido por el profesor Alejandro Cervantes, donde conocen y rescatan la historia del estado.
Alejandra Quiroz González, directora de la institución refiere que en la casa brindan toda clase de apoyos motivacionales con la intención que las personas que acuden puedan seguir sintiéndose útiles y con ganas de vivir la vida a plenitud.
“A mí me encanta venir, convivir con personas de mi edad (…) aunque los jóvenes no lo crean, nosotros los viejos, seguimos teniendo sueños, anhelos, eso nos motiva a seguir viviendo, en esta casa he hecho grandes amistades, nos reímos de nuestras ocurrencias y lloramos nuestras tristezas, siempre encontrando esa frase de apoyo”, compartió Lupita.
“Aquí me siento libre, con ganas de seguir disfrutando y agradeciendo a Dios por venir a activarme; soy maestra jubilada y hace algunos años caí en una depresión muy grande, hoy estoy llena de fortaleza, me gusta sentirme que todavía hay más cosas por hacer y aprender”, indicó Angélica otra de las usuarias del centro.
María Guadalupe Romero Pérez y José Balderrama Rosas, son la reina y rey de la Casa del Jubilado respectivamente, quienes indican que es un orgullo ser representantes de la institución, “es un honor muy grande, una experiencia muy bonita, sobre todo sentir que sigo siendo parte importante en la sociedad. Me jubilé en el 2000 después de más de 30 años de servicio como maestra de secundaria”, indicó la soberana, quien extendió la invitación para que más personas se integren a los talleres, clases y actividades que se dan en el lugar.
“Participó con mucho entusiasmo (…) estoy feliz de ser el rey. Uno debe prepararse mentalmente para llegar a vivir muchos años (…) yo les respondo cuando me preguntan ¿cómo te sientes?, ¡muy bien!, me siento más joven. El secreto es restarle un año cada vez que es mi cumpleaños, así no los voy acumulando”, dijo con gracia José Balderrama, quien actualmente porta la corona de rey.
Sin duda vivir a plenitud la vida después de los 60 años es motivo de alegría, satisfacción y una edad propia para hacer más cosas, sin la preocupación de cumplir con deberes que a lo largo de los años se tienen que cumplir más que por gusto por obligación, “mis hijos ya se casaron, tienen sus familias, así que desde temprano estoy aquí en la Casa del Jubilado y luego nos vamos a desayunar, a veces con unas amigas, luego con otras, un día vamos a un restaurante, otro al Mercado Hidalgo, o a donde se nos antoje y sin responsabilidades. Después de casi 40 años trabajando, merecemos vivir sin ataduras”, nos compartió Tere.
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A decir de la encargada de la Casa del Jubilado, los requisitos para ingresar son ser jubilado o pensionado, no importa si lo es de alguna institución pública o privada, incluso si no se han cumplido los 60 años pero ya se tiene el papel de jubilación es bienvenido.
La Casa del Jubilado y Pensionado del Gobierno del Estado, se encuentra ubicada en la calle Hidalgo número 52 esquina con Ocampo en el Centro Histórico.
