Hace más de cuarenta años, cuando de los barrios de Harlem y del Sur del Bronx surgió el hip hop como un desafío artístico a la marginación, violencia y desigualdad social que se vivía en aquella zona de Nueva York, con cámara al hombro Martha Cooper documentaría las primeras manifestaciones y el desarrollo de este arte que daría la vuelta al mundo.
Hoy a sus casi 80 años de edad, la también llamada “abuela del grafiti” continúa registrando la transformación y la naturaleza de esta expresión en diferentes geografías, incluyendo Querétaro, cuyos escritores del grafiti y artistas del mural conoció hace apenas dos años, durante el “Festival “Mextonia, Uniendo culturas a través del color”, celebrado en junio del 2017 en las ciudades de Tallin, Narva, Vijlandi y Tartu, Estonia.
Parte de estas experiencias podrán conocerse a través de “Evolución de una revolución”, exposición cronológica de 101 fotografías que la autora realizó de 1978 hasta este año, y que permanecerá cerca de dos meses en la Galería Perímetro Alameda Hidalgo,
“Nunca había tenido una exhibición en la calle, es una gran idea que podamos poner esta muestra de arte urbano al exterior”, señaló en la inauguración la también autora de “Subway Art” (1984), quien durante el evento no desaprovechó la oportunidad para fotografiar con su smathphone a los b-boys queretanos que ese mismo día presentaron varios números de brake dance.
Al término del protocolo, los reporteros se abalanzaron sobre la fotoperiodista estadounidense, quien a la pregunta “¿Cómo hiciste para salir ilesa de los suburbios de Nueva York cuando realizaste tus primeros trabajos sobre el hip hop?”, Martha sonríe, explicó que en aquellos años los fotógrafos eran muy apreciados, pues eran pocos los que habían y no cualquiera se hacía de una cámara como ahora. “Los fotógrafos eran importantes para el movimiento, porque si ellos pintaban un tren necesitaban la foto, y yo siempre se las daba… eso fue parte importante de mi amistad con los artistas”.
Además de la documentación del proceso de trabajo de Nueve Arte Urbano en Estonia, en la exposición podrá apreciarse el seguimiento que Cooper dio a las faenas de 33 artistas en el proyecto “Agua es una”, realizado el año pasado en el Centro Cultural y Educativo Manuel Gómez Morín. Con un casco de protección, arnés y cámara en mano, la intrépida fotógrafa trepó hasta el domo de este espacio, desde donde captó la materialización de una iniciativa cultural que para muchos convirtió a Querétaro en el epicentro del movimiento de arte urbano en Latinoamérica.
Esta muestra fotográfica forma parte de las acciones que conforman a Pax Urbana, un programa social enfocado a promover la paz y la comunidad a través del arte.
De acuerdo con Andrea Avendaño, secretaria de Cultura del Municipio de Querétaro, en las diferentes delegaciones y barrios se realizaran 108 murales, respetando los referentes identitarios de cada lugar. Para lograrlo, se promoverá un taller gratuito que incentivará a los jóvenes a encabezar el movimiento de arte monumental en la ciudad.
Por su parte, el director de Incusa y Nueve Arte Urbano, Édgar Sánchez adelantó a DIARIO DE QUERÉTARO que se encuentran en conversaciones con el secretario de Educación, Alfredo Botello Montes para la creación de la primera biblioteca de arte urbano en hispanoamérica, que fundarán en la ciudad bajo el nombre de “Martha Cooper” como parte del Museo de Arte Urbano que se planea edificar próximamente en la entidad.
