La comunidad lectora y artística de Querétaro acudió al Centro Educativo Cultural del Estado de Querétaro Gómez Morín (CECEQ) para entablar un diálogo con Avelina Lésper, reconocida historiadora, columnista y crítica del arte mexicana.
Lésper acudió para presentar su libro “El fraude del arte contemporáneo” el cual, en sus propias palabras, refleja su gran decepción de lo que se encuentra actualmente en los museos y de lo que se vende como arte.
En su introducción, la autora enfatizó en que la ausencia de la ritualidad en el arte era la decadencia del mismo; es decir, que a medida en que se dedica menos tiempo al proceso de creación, hay menos compromiso con los materiales, con el arte mismo.
Lésper tajantemente separó los nuevos movimientos artísticos de lo que ella considera como el "verdadero arte", el cual se encuentra mucho más enfocado en las virtudes humanas, que en las habilidades.
"Detesto el término 'habilidades', mientras que las habilidades se explotan, las virtudes se fomentan y eso marca una diferencia", explicó la curadora de arte.
Para Lésper no cualquiera puede ser considerado como un artista. "Si se dice que todo el mundo 'son artistas', no significa que lo sean; sino que cada vez hay menos arte", expresó.
Desde su perspectiva lo peor que le pudo ocurrir al arte fue la existencia de "aplicaciones" que realizan literatura, poesía y arte genérico. "¿Para qué van a destinar su tiempo ahora que una app lo puede hacer en 15 segundos?", cuestionó.
Finalmente, sentenció que si alguien no tiene el coraje de ceder sus talentos, en todo caso no tiene el coraje para ser artista.
Dentro de los asistentes se encontraron personas que aplaudían y coincidían con su discurso; no obstante también estaban quienes que la cuestionaban.
En la sesión de preguntas y respuestas se le cuestionó su crítica a movimientos como el feminismo, al cual critíca en su libro en el apartado “El Feminismo entre la cuota y el chantaje”, a lo que respondió que para ella un 'statement' que carece de fondo, profundidad, carece de mensaje.
Entre el público inconforme se encontraba también Lechedevirgen Trimegisto, reconocido artista queretano del performance, quien en más de una ocasión intentó entablar el diálogo con la escritora; no obstante nunca se suscitó el espacio.
En un reel de Instagram, publicado una hora antes de la presentación de Lésper, en donde el performancero critica la decisión de haber traído a la autora porque, al coincidir con la marcha por el orgullo LGBTQ+, simboliza la aprobación del, según sus palabras, discurso de odio que promueve la curadora y que esconde detrás de su crítica a lo performativo y movimientos artísticos emergentes.
"Esto es muy muy problemático, porque no nada más Avelina Lésper ataca este tipo de arte qué ella considera que no tiene valor, un arte que ha funcionado muchas de las veces como performances y que han ayudado a activismo, hacer visibles problemas al generar venganzas simbólicas, a lo que ella llama 'el nuevo orden', como si la moneda se hubiera volteado y ahora las comunidades que siempre han sido oprimidas, menospreciadas, ahora tuviéramos el poder de hacer lo mismo con las otras personas", sentenció.
Contrario a la ocasión en la que Lésper recibió un pastelazo por parte del público, su presentación en Querétaro ocurrió sin mayor incidente más que las posturas y opiniones encontradas.
Por casi una década, la crítica ha destacado por su postura en contra del arte contemporáneo: los performances, las instalaciones y el video arte.
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En 2020 Lésper fue el centro de una controversia en la Feria Internacional de Arte Contemporáneo Zona Maco; donde una pieza de arte colapsó mientras Lésper realizaba una crítica. La obra en cuestión era “Nimble and Sinister Tricks (To Be Preserved Without Scandal and Corruption)”, realizada por Gabriel Rico en 2018, que se encontraba valorada en 19 mil dólares.