De manteles largos se encuentra uno de los municipios más bellos del estado de Querétaro, Cadereyta de Montes, conmemorando su Aniversario 382 de su fundación.
Según la historia fue un 29 de junio de 1640 cuando se fundó la “Villa de Cadereyta” instaurada meses después por el Virrey Marqués de Villena.
Para arrancar con las festividades se llevó a cabo dentro de la Sesión Solemne de Cabildo la entrega de “Preseas Alcaldía Mayor de Cadereyta”, siendo tres las entregadas.
Presea al benefactor para la Sociedad Cooperativa de Producción Tzibanzá SC De RL de CV, representada por Antonia Biais Trejo.
Este reconocimiento es gracias a la labor de 24 años, creando empleo y derrama económica para las comunidades.
La Presea a la persona destacada fue para Luis Hitler Velázquez Olvera.
El consolidado empresario es un referente dentro del municipio en el ramo de la construcción generando empleos en la región y proyectando a Cadereyta como un lugar próspero para sus habitantes y quienes llegan a invertir.
Presea al mérito ciudadano póstumo fue para Gustavo Vega González, quien fue un personaje destacado, originario de Vizarrón trabajó en la extracción de antimonio y mercurio generando empleos en las comunidades de La Culata, La Pastilla, Culebras, Rancho Quemado y Adjuntas Rancho Quemado, también fundó una empresa denominada Mármoles de Vizarrón, fue un gran benefactor, que donó espacios públicos para construcción de escuelas, entre otras tantas cosas más.
Durante el evento el mandatario destacó la participación de la periodista e historiadora del municipio, Heidy Wagner Laclette, quien es la encargada de hacer funcionar la primera hemeroteca de Cadereyta para rescatar el acontecer del lugar de fechas recientes, pues a decir de la historiadora, las generaciones futuras podrán contar con un lugar de consulta para hechos históricos de siempre.
Tras el acto protocolario los invitados pudieron degustar de finos bocadillos y selectas bebidas, mientras se tomaban la foto del recuerdo.
Por otro lado en la parroquia de San Pedro y San Pablo se llevaron a cabo las confirmaciones colectivas de los niños caderetenses que junto a sus padres y padrinos pudieron recibir el sacramento de la iglesia católica.