“Mi amigo Sergio se acaba de comprar un cuadro. Es una tela de aproximadamente un metro por 80 centímetros, pintada de blanco. El fondo es blanco, y si entornamos ligeramente los ojos podremos percibir tres finísimas líneas transversales… blancas”, dice en la primera escena de “El arte de hartar”, Cristóbal Ramírez; director y actor de esta comedia, que como parte de su nueva temporada, se presentará todos los fines de semana en el foro del teatro Sol y Luna, hasta marzo.
La historia es una paráfrasis de la obra original de la dramaturga francesa, Yazmina Reza, en la que, con agudeza crítica y psicológica, habla sobre la fragilidad del amor fraterno, utilizando al arte como metáfora y eje conductor de los desencuentros entre los personajes.
Luego de 20 años de amistad, Iván (Edgar Wutto), un vendedor pusilánime cuyo más grande logro se encuentra detrás del mostrador de una papelería; Marcos (Cristóbal Ramírez), un ingeniero en aeronáutica de humor ácido y actitud hiperracional, y Sergio (Edgar Montoya), un exitoso médico dermatólogo, cuya reciente afición al arte moderno lo ha convertido en el snob del grupo, se sumergen en una intrincada discusión cuando este último adquiere un cuadro por la exorbitante cantidad de medio millón de pesos.
Con una escenografía sencilla, que marca el paso a otra habitación diferente con el remplazo del cuadro de la pared, los personajes se enfrentan y se sumergen en un monólogo interno, cuestionando el carácter, las decisiones e inclinaciones del otro, así como la amistad que los ha mantenido juntos durante mucho tiempo.
“Las comedias que presentamos aquí no se tratan del pastiche por el pastiche”: Cristóbal Ramírez
“Cuando empezamos el proyecto yo tenía mucho pendiente por los derechos de autor. Entonces me contacté con la oficina de Yazmina Reza en Francia y que me dicen: ‘Señor, ya rompió el record guiness de la obra de teatro más representada en todo el mundo’. Inmediatamente supe que eso la catapultaba a ser un clásico contemporáneo, y nos posibilitaba seguir dándole vida, “, asevera el director, quien asegura que más que relatar la historia de tres amigos varones, refleja la esencia de las relaciones interpersonales, y presenta tres arquetipos de amigos que cualquiera podría tener.
“Teatro Sol y Luna hace teatro inteligente. Su fuerte siempre han sido las obras históricas, pero las comedias que presentamos aquí no se tratan del pastiche por el pastiche, lo que tiene el Arte de hartar o Cuando los amigos se encuentran, es que deja un mensaje, es comedia inteligente… es una hora cuarenta donde estamos tres actores arriba del escenario, partiéndonos el alma para que la gente no solamente se ría sino también reflexione y se lleve algo a casa”, puntualizó.
Pocos minutos antes de arrancar con la función número 180, Wuotto señaló que la misión es alcanzar las 200 representaciones con esta obra. También anunció la presentación de un nuevo proyecto de teatro histórico sobre Emiliano Zapata, e invitó al público a formar parte del estreno de “Chanclicienta”, una comedia original de Jorge Leonel Cabrera, que se presentará el próximo jueves, a las 21:00 horas, en este mismo recinto.
