La directora japonesa Chie Hayakawa imagina con "Plan 75", estrenada en Cannes, un futuro no muy lejano en el que como solución al impacto del creciente envejecimiento de la población se ofrece a los mayores de 75 años la posibilidad de recibir la eutanasia voluntaria.
No es algo que crea que vaya a pasar en dos o tres años, pero que sí ve factible dentro de unos cinco, explicó a EFE la cineasta, que ha estrenado su ópera prima en Una Cierta Mirada, la segunda en importancia del certamen, que celebra hasta el 28 de mayo su 75 edición.
Hayakawa ya había abordado este tema en su corto "Anticipation Japon" (2018) y en este largometraje quiso ahondar en él decepcionada con la sociedad de su propio país, que en su opinión empuja a los mayores y vulnerables a considerarse un problema.
"Siento que las personas mayores se sienten cada vez más incómodas. Antes ser mayor estaba bien visto, ahora la gente cree que ser demasiado viejo es una carga y le preocupa ser pobre, tener demencia y que le falte el dinero".
En su largometraje Chieko Baisho encarna a Michi, una mujer mayor que se ve tentada por ese plan del Ejecutivo. Sin hijos ni un salario decente, lo ve como la opción más apropiada para finalizar su vida.
La cinta también da voz a un comercial de ese programa que ofrece dinero y apoyo psicológico a los ancianos que firman el contrato y sigue a una trabajadora filipina de la instalación sanitaria.
En Japón la eutanasia no es legal. "Yo no estoy en contra, pero no quiero que se legalice ese tipo de plan en un futuro. Esta película no es sobre si la eutanasia es buena o mala, mi crítica va más hacia la intolerancia de la sociedad", contó la realizadora.
Esa intransigencia se reflejó en 2016 en uno de los peores crímenes de la historia reciente de Japón, cuando un hombre de 26 años mató a 26 personas de un centro de dependientes e hirió a 26 abogando por un país donde los discapacitados pudieran recibir la eutanasia para aliviar la "carga" en sus familias y la sociedad.
"No es el único que lo piensa y me asusta ese pensamiento", añadió Hayakawa, que para su película entrevistó a 15 personas mayores para conocer su historia y su opinión respecto a un plan como el que plantea, y para su sorpresa la mayoría le contó que le gustaría disponer de esa opción.
Si la sociedad brindara apoyo suficiente, apuntó, no se sentirían así. "Critico que se ofrezca esa opción a gente que está sufriendo en lugar de darles ayuda", concluyó la directora, que espera que su obra contribuya al debate.