Serie "Snowdrop" acusada de blanquear la dictadura militar

La seire surcoreana ha llevado a centenares de miles de personas a volcar su rabia en redes sociales y exigir su cancelación

EFE

  · martes 21 de diciembre de 2021

Foto: Cortesía | koreaboo.com

El estreno de la serie televisiva "Snowdrop" ha desatado duras críticas en Corea del Sur, donde se acusa a esta producción de blanquear las torturas indiscriminadas y con cargos infundados que perpetró la dictadura militar de Chun Doo-hwan entre 1980 y 1988.

La serie, producida por la cadena privada JTBC (responsable de éxitos recientes como "Sky castle" o "Itaewon class") y estrenada este fin de semana en Corea del Sur, ha llevado a centenares de miles de personas a volcar su rabia en redes sociales y exigir su cancelación, al tiempo que algunas empresas han retirado su patrocinio.

El pasado domingo se publicó una petición en el portal de la oficina presidencial surcoreana solicitando que deje de emitirse "Snowdrop" (cuyo título original es "Seolganghwa", "Campanilla de nieve" en coreano) que a día de hoy martes suma ya 300.000 firmas.

Aquellos críticos con esta ficción, que está pendiente de ser estrenada en la plataforma digital Disney +, aseguran que distorsiona lo padecido en la década de los ochenta por los movimientos pro-democracia a manos de la junta de Chun, que falleció el pasado noviembre a los 90 años.

La serie versa sobre la relación amorosa entre dos personajes interpretados por el actor Jung Hae-in y Kim Ji-soo, integrante de la exitosa banda femenina de K-Pop Blackpink y más conocida por su nombre artístico, Jisoo.

En la serie, ambientada en 1987, el personaje que interpreta Jisoo, una universitaria, se topa en su residencia con un hombre ensangrentado (Jung) al que acoge pensando que se trata de un activista pro-democracia que está siendo perseguido por las autoridades.

El joven, que es en realidad un espía norcoreano que se encuentra realizando una misión secreta para tratar de manipular las cruciales elecciones de diciembre de 1987 en Corea del Sur, decide mantener su identidad en secreto y hacerse pasar por activista.

Los críticos consideran que la serie propaga las ideas extendidas entonces por la junta militar, que aseguraba que los activistas pro-democracia estaban vinculados al régimen norcoreano, cuando en realidad muchos de estos disidentes fueron torturados, algunos hasta la muerte, falsamente acusados de colaborar con el país vecino.

La Sociedad en Memoria de Bak Jong-cheol, estudiante de Seúl cuya muerte tras horas de torturas desencadenó las protestas multitudinarias que desembocarían en las elecciones democráticas de 1987, ha condenado también la serie diciendo que su argumento puede servir para justificar las torturas de la junta.

El director de la serie, Jo Hyun-tak, ha defendido que básicamente todo en la serie, a excepción del momento histórico en el que transcurre, es ficción.