¿Qué harías si la única solución para tus problemas fuera revelar todos sus secretos? ¿Hablarías o callarías? ¿Influiría en tu decisión si tuvieras que hacerlo frente a tu familia? En esa situación se encuentran los personajes de Confesiones, el nuevo thriller mexicano del director Carlos Carrera.

La cinta presenta a una familia adinerada de la Ciudad de México, cuya vida parece ser de lo más perfecta y ejemplar. Sin embargo, un día la integrante más pequeña es secuestrada, lo que conmociona a la familia entera. Mientras que Ramiro, Sara y Juan Pablo idean formas de recuperar a la pequeña, aparece un sujeto (Juan Manuel Bernal) dispuesto a negociar el retorno de la niña, pero lo que pide a cambio no es un trueque monetario, sino una confesión. ¿Será que cederán sus más oscuros secretos a cambio del regreso de su adorada pequeña?

El guión de esta cinta fue realizado por Alberto Chimal, escritor mexicano aclamado como uno de los principales exponentes de la literatura fantástica iberoamericana. Esta película llegará a los cines del país este 2 de noviembre.

Dentro del reparto se encuentran los talentos de Claudia Ramírez (Mariana Toledo en ¿Quién mató a Sara?), Juan Manuel Bernal (Joaquín Carranza en Monarca), Luis Gnecco (Braulio Garrido en Nadie Sabe que estoy aquí) y Emilio Treviño.

Emilio Treviño es un actor de doblaje conocido por ser el responsable de dar la voz al español de los personajes del actor franco-estadounidense, Timothée Chalamet. Como tal, inició su carrera como actor de teatro, lo que le permitió desarrollar habilidades para brincar de un mundo actoral al otro.

En entrevista exclusiva para el DIARIO DE QUERÉTARO, el actor mexicano nos comenta sobre su debut actoral, sus primeras impresiones respecto al guión y lo que el público puede esperar este jueves en las salas de cine.

Pensando en que el eje central de la película son los secretos familiares, ¿qué tipo de discusiones te gustaría que se generaran entorno a esta cinta? ¿Cuál es el mensaje?

Además de ser una película enfocada en el entretenimiento, su mensaje es muy claro y poderoso. Desde el filme no buscamos manipular o influenciar a las personas, pero sí buscamos presentar los temas, hablar de las conversaciones incómodas que surgen dentro de las familias, eso es lo que mostramos y les damos todas las posibles situaciones para que las analicen y puedan escoger.

En sí, la película genera muchas preguntas, desde el quiénes somos, el por qué hacemos lo que hacemos, por qué elegimos lo que elegimos, por qué tenemos secretos, por qué los guardamos, por qué elegimos no compartirlos, etcétera.

Al final, todos tenemos heridas, yo tengo las mías, tú tienes las tuyas, así que esta película principalmente aborda los temas urgentes que hay que hablar, que se tiene que exponer y pues sobre todo el quitar el tabú de cómo se habla de los temas “prohibidos”.

• Esta es una producción mexicana, ¿qué es lo que consideras que deja el hecho que desde México se generen este tipo de películas y desde el género de thriller/suspenso?

Yo creo que habrá un antes y un después de esta película, porque existe mucho prejuicio sobre lo que se hace en el cine mexicano, tanto desde la audiencia como desde los actores mismos. Me ha pasado que me invitan a una premiere de una película mexicana y en primer momento pienso que será otra ‘comedia romántica’, y es una idea súper errónea porque el cine mexicano siempre ha sido bueno, y se están generando cosas sumamente buenas. Hay grandes directores y actores que siempre están proponiendo proyectos interesantes y que luchan por romper las estructuras preestablecidas del cine mexicano; así que yo creo que esta película representa esas propuestas, que tal vez son poco usuales, pero que ponen en alto la industria de nuestro país.

• ¿Cuál fue tu primera reacción al leer el guión? ¿Qué fue lo primero que pensaste de tu personaje?

Creo que dije ‘Holy Shit!’, fue algo que me emocionó muchísimo y dije sí o sí tengo que ser parte de este proyecto. Lo que más me fascinó fue que al momento de leer el guión yo no tenía idea alguna de cómo íbamos a llevar a cabo las escenas y yo creo que era es una gran forma de empezar un proyecto porque siempre lo más complicado es mantenerse abierto a todas las posibilidades de interpretar el libreto, así que si un actor, a veces porque el ego nos gana, creemos que ya lo sabemos todo y adelantarnos al director, cuando la realidad es que todavía no sabemos qué es lo que él requerirá de nosotros, una vez llegado el día de filmación todo puede cambiar.

Además a mí lo que me encanta de los proyectos en los que me toca participar, es que tengan algo que comunicar. Si no tiene ningún mensaje, mejor no hacerlo, ¿verdad?

• ¿Cómo es darle vida a Juan Pablo? ¿Cómo describirías su personalidad?

Juan Pablo es una persona muy visceral que ha aprendido a vivir a través de muchos filtros y capas, ha adoptado una infinidad de máscaras porque lo han lastimado mucho y tiene muchísimas heridas internas de las que no es consciente del todo, así que su manera de vivir es pelear. Él siente que todo el tiempo tiene que pelear porque el mundo está en su contra y nadie lo entiende.

Este tipo de personaje es sumamente complejo de darle vida, porque es muy diferente a lo que yo soy y tampoco buscas caer en un cliché, o sea, no quisiera caer en la persona ruda y ya. Estamos en 2023, ya hemos visto 80 películas con el chico rudo incomprendido, así que el reto es no interpretar lo obvio y decir, okay, esta persona es visceral y siempre está a la defensiva, pero también puede ser tierno porque es generoso y amable.

Es necesario identificar dónde vive su miedo, dónde ha sido herido, cuál es su verdadera herida y qué es lo que realmente necesita, porque él lo que quiere es a su mamá, a su papá, a su hermana.

Así que el descifrar todo eso hace de esta historia mucho más interesante y entretenida, tanto para mí como para el público, porque al final es que ellos [la audiencia] pueda sentir lo que estoy transmitiendo o quiero decirles.

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• ¿Fue complicado para ti realizar este brinco?

Fijate que como yo inicié mi carrera haciendo teatro, desde los cinco años, eso me ayudó muchísimo al momento de tener que estar ya físicamente en las escenas, y no es como si el doblaje no ayudara para nada. Ser actor de doblaje implica ser como un gimnasta actoral en donde sales y entras de la ficción de manera constante.

Como artista de doblaje puedes estar trabajando en un mismo día hasta siete proyectos, así que a las 10 de la mañana puedes estar grabando una comedia, pero sales y tienes que entrar a una cinta de terror, así que tienes que cambiar el ‘chip’. Así que creo que todo eso me ayudó a ejercitar este músculo actoral y que de alguna manera me estuvo preparando para entrar a esta etapa de mi carrera.