La luz roja de un carro se refleja en un charco del empedrado mojado. La ciudad empapada por la lluvia de agosto, el cielo nublado y gris en su esplendor, y los cánticos de lo que parece una ceremonia religiosa se escuchan en el vacío de la calle sigilosa, acompañados de un bajo discreto. “In ár gCroíthe”, sollozan las voces en irlandés. Pero no hay templo, ni feligreses ni cruces. Es el recuerdo nostálgico, el malestar y la mutilación cultural. “Gone is the day, gone is the night, gone is the day”. Es el quinteto de Dublín, Fontaines D.C., que nos envuelven en la lluvia nostálgica, la rebelión y el descontento de su álbum que estamos a menos de dos meses de escuchar en vivo, en el Foro Sol.
Lluvias como las últimas que ha vivido Querétaro están presentes en Londres, Inglaterra, el lugar de residencia de cuatro de los cinco integrantes de Fontaines D.C. Su hogar, la isla del trébol, está lejos de ellos, pero eso no impidió la concepción de un álbum infusionado con un fuerte acento y sentimientos irlandeses. Skinty Fia (2022, Partisan), es la manifestación de unos chicos que se sienten incómodos en un hábitat ajeno, mutilados, en cautiverio. De ahí la frase en irlandés con la que fue bautizado el disco, que significa “la condena del ciervo” (the damnation of the deer).
Esta frase fue retomada del vocabulario de la tía abuela del baterista de la agrupación, Tom Coll. La portada es una expresión de esta frase. El alce, mutilado de su hábitat natural, de sus raíces, es puesto en el pasillo de una casa y alumbrado por una luz roja artificial, así como aquella luz chillona que alumbraba la calle empedrada en medio de la lluvia y la oscuridad. Así sucede con los cuatro jóvenes irlandeses en Inglaterra. Son alces en las calles ajenas y oscuras, alumbrados por luces sangrientas y cuyas manifestaciones culturales son mutiladas.
Ejemplo de esta identidad irlandesa suprimida está en la noticia a la cual aluden los cánticos que escuchábamos bajo la lluvia. “In ár gCroíthe go deo”, frase en irlandés que se traduce como “en nuestros corazones para siempre” (in our hearts forever), era el deseo de la fallecida Margaret Keane, mujer de Irlanda cuya lápida yace en tierras inglesas. Sus familiares querían respetar su deseo de incluir la frase en irlandés gaélico en su epitafio, pero la Iglesia de Inglaterra impidió su voluntad debido a que se podía interpretar la frase con fines provocativos o políticos, como ser parte del IRA (Ejército Republicano Irlandés Provisional).
La noticia, publicada en junio de 2020 en el Irish Post, conmocionó a la banda y a la comunidad irlandesa, quienes calificaron la decisión como racista.
La familia de Keane tiene conocimiento de la canción. Recibieron la letra por correo y se reunieron con los Fontaines D.C. Grian Chatten, el vocalista de la banda, dijo a los medios en aquel momento que “el reconocimiento de la canción por parte de la familia es realmente una validación, pero no es un premio. Lo único que me importa es que tenemos su bendición para lanzar la pieza, que es lo más importante”. Es así como, esta melodía con la que abren el álbum, define el rumbo musical y acentúa el sello ideológico y artístico de la banda.
En canciones como Big shot, How cold love is, Nabokov y Jackie down the line, el bajo continuo de Conor Deegan III, los riffs dramáticos de Carlos O’Connell y Conor Curley, y la voz melancólica de Chatten, recrean el ambiente idóneo para hacer una crítica al amor y a cómo las personas erosionan sus vínculos afectivos. Pero, ojo, porque el amor al que se refieren estos chicos, traspasa lo romántico.
I love you, la canción que, podríamos asumir, es la más certera para abordar el tema amoroso, está dedicada al hogar de la banda. Grian Chatten entona “and if it’s a blessing, I want it for you”, pero también reconoce las grietas en este amor a su patria al cantar “but this island’s run by sharks with children’s bones stuck in their jaws”, refiriéndose a las situaciones de crisis políticas que ha vivido Irlanda, a la vez que aborda el problema de suicidio en los jóvenes en el verso “every young man wants to die”.
El sentimiento de Chatten podría entenderse por nosotros, como mexicanos, cuando decimos amar a nuestro país, pero sabemos que no es un amor estable ni perfecto, y está plagado de problemas y heridas que siguen abiertas, como el narcotráfico, la corrupción política o el machismo sistémico. I Love you no es para dedicarse, es para empatizar.
La influencia de Joy Division puede notarse en canciones como la mencionada Nabokov y Bloomsday. En ambas, los jóvenes pintores de sonidos de nostalgia y disconformidad, nos adentran en las emociones que personajes como Ian Curtis quisieron transmitir en 1979, con su obra maestra Unknown Pleasures (Factory Records). Quizás Skinty Fia y otros álbumes de post-punk actual no sean la resurrección perfecta de clásicos como el mencionado de Joy Division o el Pornography (1982, Fiction Records) de The Cure —también considerado una joya del rock gótico—. En todo caso, son un signo de que el subgénero nunca murió y está en manos de músicos jóvenes, cuyo contexto actual enriquece al tinte musical y ofrece una mirada distinta para apostar por el post-punk. El uso del acordeón por parte de Chatten en The couple across the way es una forma de demostrar el atrevimiento de estas bandas jóvenes, así como su grandeza y talento. Esta canción, igual que las demás, transmite la historia de un amor fracturado.
Roman holiday y Skinty fia son dos favoritas personales. La primera retoma la experiencia de vivir en un hábitat diferente al natural. Fontaines D.C. narran la experiencia de ser irlandeses en Inglaterra y, a la vez, nos invitan a nunca olvidarnos de nuestras raíces y nuestro patrimonio. De no dejar que nuestra identidad sea mutilada: “when they knock for ya don’t forget who you are / Skinty Fia”. Aquí, con mayor razón, es cuando se hace explícita la presencia de la frase irlandesa que bautiza el álbum. Las dos palabras que compaginan una mezcla de sentimientos en una pieza con aires de esperanza.
La segunda canción va de la mano con los temas presentes en las anteriores, pero se destaca por la atmósfera en la que nos sumerge. Con la voz de Chatten que parece tener escasa vida, a la vez que relata una historia de decepción, los demás instrumentos recrean el ambiente perfecto para ser parte de la tensión y, junto con ellos, dejar que el fuego rojizo de Skinty Fia nos provoque, como los alces que somos. Es una canción que pareciera generar emociones negativas, pero el ritmo despierta la sensación de bailar en medio del caos, bajo la lluvia que choca con el empedrado y nuestros rostros. Nuevamente, es un guiño a clásicos de Joy Division, como Transmission, She’s lost control y New dawn fades. Canciones repletas de oscuridad, pero que nos hacen sentir vivos.
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Los irlandeses, más que una banda prometedora, ya han certificado su brillantez y relevancia. Skinty Fia ganó un Brit Award en la categoría de Mejor Grupo Internacional en 2023, y posicionó a la banda en el primer lugar de las listas británicas de discos, por primera vez. Cabe mencionar que el álbum previo a la condena del ciervo, A Hero's Death (2020, Partisan) fue nominado a un Grammy en 2021 a Mejor Álbum de Rock, así como otra nominación a la categoría en los Brit Awards que sí lograron ganar con Skinty Fia.
Pronto podremos sentir la euforia y bailar al ritmo de estas piezas de arte que Fontaines D.C. fabricó para nosotros en el Foro Sol, el 6 y 7de octubre, durante su show de apertura para Arctic Monkeys. Personalmente, estoy feliz de que los monos árticos hayan unido talento con los irlandeses y nos ofrezcan una experiencia musical espectacular. Con boleto en mano y el Skinty Fia en mi corazón, la emoción se apodera de mí en estos días lluviosos de agosto.