Decididas a narrar su propia historia, a lo largo de siete meses doce mujeres se enfrentaron a la difícil tarea de plasmar sus ideas sobre una hoja en blanco. La iniciativa surgió de la escritora y periodista, Diana Pérez Ortiz, y de la actriz y gestora cultural, Flor Moreno, quienes a través del género autobiográfico, desde hace cinco años se han dedicado a fomentar la escritura entre la población.
Este año, al proyecto se sumaron las queretanas María de Lourdes Murillo, Guadalupe López, Olga Lidia Tirado y Liliana Acosta, así como ocho mujeres radicadas en Hidalgo; quienes a través de Skype participaron en las diferentes actividades y siguieron todo el proceso del taller.
El resultado fue el libro “Líneas de vida. Una puerta al ayer”, mismo que las escritoras y las coordinadoras, presentaron en las instalaciones de la Galería Rosario Sánchez de Lozada.
“A mi me habría encantado que mi abuela hubiera escrito su autobiografía, no para ganar un Premio Nobel de Literatura, pero sí para dejar documentada su experiencia en la guerra de los cristeros y algunos momentos de la revolución mexicana… como no lo hizo, y yo no quiero que se pierda lo mío, por eso decidí hacerlo”, manifestó María Soledad Díaz de León, una de las hidalguenses que, desde Pachuca, se unió a este proyecto.
“Mírame”, “Entre la dicha y la sombra”, “La misma cara”, “El alegre parlotear de las gallinas”, “Qué hombre tan más simpático”, “La libertad del desapego” y “Los detalles donde haces falta”, son los títulos de algunos de los textos que conforman a esta primera publicación, cuyos temas más recurrentes son la maternidad, las relaciones de pareja, la infancia, el amor y la muerte.
“No solo queríamos que las mujeres se empoderaran con la escritura, sino que también fueran conscientes de para qué y para quiénes escriben”, dice Moreno, quien asegura que a través de la palabra, las mujeres participan en la construcción de la memoria colectiva, visibilizando sus experiencias y su presencia en la historia.
“En el libro, Martha Canseco habla de cómo vivió el movimiento del 68 cuando era apenas una adolescente”, agrega Flor, y menciona el texto “Parir-me” de Alejandra Guerrero, quien desde una postura crítica feminista habla de su experiencia como madre, adelantando un poco las temáticas con las que la lectora, o lector, podrá encontrarse.