Daniel Valencia Cruz, arqueólogo mexicano mejor conocido por todo el trabajo de rescate, conservación y protección de la Zona Arqueológica El Cerrito, falleció esta mañana en Querétaro a los 63 años, así lo dio a conocer el Instituto Nacional de Antropología e Historia en sus redes oficiales.
Aunque no se revelaron las causas de su deceso, la institución recordó los aportes del investigador, quien centró su labor en la investigación, conservación, protección y difusión del patrimonio arqueológico del Centro Norte de México, y estuvo 28 años al frente del proyecto académico de la Zona Arqueológica y Museo de Sitio El Cerrito.
“Daniel fue pionero de las investigaciones de Arqueología Histórica en Querétaro y formador de arqueólogos, antropólogos, restauradores, arquitectos, diseñadores, promotores culturales, guías de turistas y custodios”, informó el INAH.
Daniel Valencia Cruz estudió arqueología en la Escuela Nacional de Antropología e Historia, realizó una especialidad en Conservación de Arquitectura en tierra y obtuvo el grado de doctor en el Programa de Gestión del Patrimonio Histórico de la Universidad Pablo de Olavide en Sevilla, España.
Sus inicios en la práctica profesional fueron en la Ciudad de México, llevando a cabo investigaciones de arqueología histórica en La Ciudadela. A principios de los años 90, ingresó al Centro INAH Aguascalientes en donde, además de realizar actividades de arqueología histórica, desarrolló investigaciones sobre arte rupestre.
En 1994 se integró al Centro INAH Querétaro en donde colaboró en diversos proyectos de investigación, rescates y salvamentos arqueológicos hasta que quedó al frente del proyecto de investigación El Cerrito, mismo que encabezó durante 28 años con diversas líneas de trabajo dirigidas al conocimiento de las sociedades del pasado y la vinculación del sitio arqueológico con la sociedad actual.
Durante este tiempo, continuó atendiendo la arqueología de sitios históricos, así como la conservación de bienes arqueológicos inmuebles como Santa Rosa de Viterbo y El convento de San Francisco, entre otros.
Sin embargo, su obra de vida fue la Zona Arqueológica de El Cerrito, en el municipio de Corregidora. Su preocupación por la protección legal y técnica de este sitio lo llevaron a realizar gestiones que culminaron con la obtención y protección del perímetro de la zona arqueológica y de la vegetación a sus alrededores, convirtiéndolo en un lugar que conjunta no sólo la historia cultural, sino un espacio para el conocimiento de la flora y la fauna originaria del área.
Su más reciente trabajo fue el diseño, construcción y montaje del Museo de Sitio de El Cerrito, inaugurado el 13 de febrero de 2019, donde integró su incansable labor de investigación que dio como resultado el amplio conocimiento sobre el pasado Tolteca de la región.
➡️ Si quieres recibir las noticias en tu Whatsapp, envía la palabra ALTA
Cabe mencionar que sus avances de investigación, rescate y conservación de la zona arqueológica de El Cerrito, quedaron documentados en el suplemento cultural Barroco de este periódico, donde el investigador envió colaboraciones desde 2004.
Con información de INAH-Querétaro