Jesús Almanza recuerda como si fuera ayer la primera vez que escuchó a la Orquesta Filarmónica del Estado de Querétaro (OFEQ); fue en el debut de esta agrupación en 1992, con el Auditorio Josefa Ortiz de Domínguez como escenario: “Lo tengo grabado en mi corazón, se tocaron Redes de Revueltas y la Novena sinfonía de Beethoven, yo estaba por supuesto entre el público”, dice el músico con una sonrisa.
A 30 años de este primer encuentro, el también director de orquesta busca convertirse en el titular de la OFEQ, una agrupación de la que fue pianista durante diez años y con la que ha colaborado en más de una ocasión en diferentes proyectos.
“Te he de decir que mi debut como director fue con una camerata de esta orquesta, fue mi primer concierto y lo di con los maestros de la OFEQ hace 25 años”, asevera en entrevista.
Tras la salida de Ludwig Carrasco en 2019, Almanza asumió el papel como director huésped de la OFEQ, y desde entonces se ha encargado de mantener a flote todas las temporadas de esta orquesta declarada Patrimonio Cultural Inmaterial del Estado de Querétaro en 2016.
En octubre por fin arrancó el proceso de elección, mismo que se había pospuesto por la pandemia; esta vez participan seis candidatos quienes han presentado un concierto de prueba en las últimas semanas, y ahora llega el turno de Jesús Almanza.
Su presentación se llevará a cabo este viernes 16 de diciembre a las 20:00 horas, en el Teatro Metropolitano. Se tratará también del último concierto de temporada de la agrupación, en la que se interpretará Romeo y Julieta de Prokofiev y la sinfonía no. 5 de Shostakovich, “el plato fuerte” de la noche, afirma el director.
La obra se estrenó en 1936, “en pleno régimen estalinista cuando él [Shostakovich] lo aquejaba un gran estrés y la ansiedad debido a que allegados, familiares, amigos, muchos de ellos habían sido desaparecidos, otros apresados y asesinados y él también estaba en la mira porque recién había estrenado la ópera Lady Macbeth, que es un drama expresionista y al régimen no le había gustado, la consideró música depravada y decadente.
“De hecho él no alcanza a estrenar su Cuarta sinfonía, sino que se estrena primero la Quinta, una obra llena de muchos colores; va desde el dolor humano que podemos sentir en el tercer movimiento, que es una especie de réquiem y homenaje a los caídos, hasta el gran cuarto movimiento que es un grito de renacimiento, de esperanza, casi como la de un héroe que triunfa ante la adversidad. Es una obra muy intensa como todo el repertorio ruso, de una gran exigencia técnica; sin embargo podrán ver que esta orquesta lo va a hacer de forma extraordinaria porque ellos tienen todo para lograrlo”, asiente.
Los boletos para este concierto se pueden adquirir en: https://filarmonicadequeretaro.pagatusboletos.com/, el costo es de 160 y 110 general y de 90 para estudiantes, maestros e INAPAM.
Un patrimonio cultural sin casa y sin recursos
“La OFEQ es una orquesta viva y apasionada”, destaca el director sobre la agrupación, y señala que el nuevo titular de la orquesta no solo deberá preocuparse por preparar buenas temporadas, sino también por mejorar las condiciones laborales de sus más de 70 instrumentistas.
“Es una orquesta que tiene un sueldo por debajo de la media nacional, tenemos que trabajar en eso, buscar la manera de hacernos de más recursos para resolver este aspecto y tener músicos comprometidos y contentos con su trabajo.
“Por otro lado, también es una orquesta que quizá vaya a empezar a sufrir un relevo generacional, eso es una realidad, y bueno creo que debemos prepararnos para eso. Es necesario contar con una figura de un fideicomiso o un fondo especial porque hay maestros que ya se nos van y que han ofrecido toda su vida a la OFEQ; que han dejado un país incluso para venir a nuestro país, y han dejado su vida realmente en esta orquesta; además de todos sus derechos como trabajadores, se merecen un bono de agradecimiento”, destaca.
Asimismo, refiere que la orquesta necesita renovar varios instrumentos como las percusiones, y conseguir una concha acústica para elevar la calidad de sus presentaciones.
“Hace falta una concha acústica, a veces ensayamos toda la semana en un espacio que no es el Teatro Metropolitano, y llegamos el jueves y es un estrés verdadero para los músicos, para el director, porque tenemos que adaptarnos a una acústica, más bien a una falta de acústica y a un ambiente muy seco; se tiene que resolver una concha acústica que nos permita ofrecer conciertos de gran calidad”.
Sobre la sede de conciertos, asegura que este es uno de los problemas más urgentes; pues la agrupación lleva mucho tiempo sin un espacio oficial que afecta no solo a la creación de un público, sino también a los ensayos y presentaciones.
“A 30 años de vida, la OFEQ no tiene una sede, es un patrimonio cultural sin casa (…) He de decir que la Secretaría de Turismo de Querétaro nos ofrece el Teatro Metropolitano de una manera muy amable, pero no es oficial, el problema es que a veces ellos tienen sus agendas y de repente no tenemos la manera de hacer una temporada. A veces nos facilitan los jueves o los viernes, en otras los miércoles… esa fluctuación no nos viene bien para crear un público que tanta falta nos hace.”
Por lo anterior, Almanza señala que pueden generarse sinergias entre la Secretaría de Cultura de Querétaro y otras instituciones como las Secretarías de Desarrollo Social, Turismo y Educación, e incluso con la iniciativa privada.
Entre otras acciones pendientes, menciona que está el rehacer un patronato para generar más arraigo de la OFEQ en la sociedad, además de conciertos para jóvenes y niños en cada temporada y más presentaciones anuales en otros municipios.
“La orquesta es como el rostro de la ciudad, es un aspecto cultural muy importante, y la cultura es lo que recordamos de toda civilización, su cultura es la que nos impacta porque es lo primero que nos llega”, apunta.
Más sobre el director
Jesús Almanza Castillo debutó de manera profesional en 1996 con la Orquesta Filarmónica de Querétaro de la cual fue pianista titular durante 10 años y después director asistente.
Como director huésped se ha presentado con diversas orquestas entre las que destacan la Orchestra Sinfónica di Pescara en Italia; la Sinfónica del Estado de México; la Sinfónica de Guanajuato; la Sinfónica de San Luis Potosí; la Orquesta Sinfónica de Zacatecas; la Orquesta Sinfónica de Aguascalientes y la Sinfónica de Pachuca.
Actualmente es director de la Camerata Santiago de Querétaro, el Coro Santiago de Querétaro y la Orquesta Sinfónica Juvenil Silvestre Revueltas que fundó en 2005; con esta agrupación ha participado en el Festival Internacional Cervantino, además de realizar una gira internacional.
Desde hace 25 años es docente de la Facultad de Música de la Universidad Autónoma de Querétaro y además cuenta con una maestría en Arte Moderno y Contemporáneo.