El artista inglés Ben Stephenson y la diseñadora colombiana Melissa Aristizabal conjuntaron talento y visión artística para dar vida a la exposición titulada "Genesis in the retort", inspirada en los textos alquímicos “Elementa chemiae” del profesor J.C Barchusen, como una forma de conectar narrativas fantásticas, mitológicas y alternas para dar una explicación paralela a la historia formal sobre la vida y la muerte.
A través de una muestra pictórica que consta de una serie de siete pinturas de gran formato, los artistas vuelcan en un modo particular y experimental, diversas temáticas y reflexiones en torno a momentos de vida, materia prima diversa, metamorfosis y evolución; muerte del cuerpo terrenal, ascenso y el más allá, adentrándose en una aventura plástica que traduce la experiencia vital de la vida cotidiana, con elementos de alquimia, tomados de la obra de referencia, interconectados con elementos de leyendas y mitologías ancestrales que son parte fundamental de las cosmovisiones de las culturas.
Ben explicó a Diario de Querétaro que la obra “es una mezcla de muchas ideas de los mitos de la historia humana e intentamos hacer una narrativa para encontrar el común entre ellas; a través de siete pinturas en las que quisimos contar la historia del origen de la vida, el trayecto en ella, la muerte y lo que pasa después de la muerte”.
El arribo de ambos artistas a Querétaro se logró a partir de un intercambio artístico generado en el Centro Cultural BEMA, en donde estuvieron trabajando alrededor de cuatro meses y medio en las piezas para esta exposición. Stephenson describió que durante su estadía muchos elementos los retomaron de sus vivencias en la ciudad para complementar las ideas místicas, con los atardeceres, la naturaleza y los colores de la urbe.
“Mucha de la inspiración que trazamos en las obras está basada en la cultura de México y de Colombia, donde yo viví y de donde es Melissa, así que tratamos de documentar a nuestra forma esa riqueza (…) la cultura acá es muy fuerte y eso permite que logremos una conexión especial con ella”, describió Ben.
Las obras visibilizan el sincretismo cultural y la diversidad de pensamiento, que, a su vez,convergen en historias y narrativas de creencias que unen a la gente bajo un sello de cultura o de pueblo, generando una identidad colectiva.
Al cuestionar el porqué de la elección temática de la exposición, Ben puntualizó: “Creo que la mística es algo que une a todas las personas; aquellas cosas que no podemos explicar pero que sentimos y sabemos que existe y creo que logramos hacer una simbiosis de muchas culturas e influencias, destacando, principalmente la cultura mexicana”.
Melissa es una diseñadora y muralista que reinventa las nociones de la divinidad tal como se encuentran en culturas que van desde Mesopotamia hasta el catolicismo; mientras que Ben, trabaja en diversas técnicas que incluyen pintura, escultura y grabado, explorando las nociones de la historia compartida y la experiencia humana.
La muestra traza paralelismos entre el proceso creativo y la búsqueda del origen, del espíritu supremo e incluso, de la piedra filosofal; y proponen que la creatividad en sí misma, es una mezcla entre intuición y azar, y refleja vivamente la experimentación del artista con los elementos, las pinturas, los solventes y demás materiales cual alquimistas, tratando de encontrar un por qué y un para qué a través de sus obras.
La exposición permanecerá vigente hasta el 18 de julio en el Museo de la Cuidad, de martes a domingo, en un horario de 10:00 a 18:00 horas. Entrada gratuita.