El fotógrafo mexicano Pedro Valtierra visitó el Centro Queretano de la Imagen para presentar el último número de la revista Cuartoscuro, en la que se destaca la labor de dos periodistas gráficos que enriquecieron la mirada de El Sol de México y contribuyeron con su trabajo a la historia de la fotografía en el país.
El primero de ellos se trata de Javier Vallejo, un fotoperiodista que de laboratorista pasó a ser corresponsal de guerra en este periódico, y se convirtió con ello en uno de los primeros fotógrafos mexicanos en cubrir eventos internacionales.
“Los periódicos mexicanos lamentablemente no se han caracterizado por enviar a sus propios fotógrafos o reporteros fuera del país. Si revisamos la historia nos damos cuenta de que la dependencia que tienen los medios mexicanos de la información a las agencias, es una característica. El Sol procura ser más independiente en ese sentido, y sobre todo, tener fotógrafos y reporteros fuera del país para que nos cuenten las cosas con una visión más mexicana”, aseveró Valtierra.
Además de destacar la estética y narrativa de las fotografías de Vallejo, Pedro Valtierra
subrayó el aporte que este fotógrafo hizo a la historia tecnológica del diarismo, al ser él quien transformó la prensa del blanco y negro clásico a la vanguardia del color.
En la edición número 172 de esta revista también se menciona a Lilia Hernández, quien también empezó su carrera como periodista gráfica en El Sol de México y es considerada la primera mujer fotoperiodista en la capital del país.
“Caso interesante que nos invita a reflexionar [el nuevo número], es que en El Sol de México hubo estos aportes al nuevo periodismo con la integración de mujeres en sus redacciones. La fotografía mexicana ha tenido representantes importantes, como es el caso de Lilia Hernández, que trabajó en los años 70 como fotógrafa del periódico El Sol de México (…) En Cuartoscuro no somos historiadores, pero estamos investigando la presencia de la mujer y trabajando en su aporte a la fotografía y al periodismo”, dijo.
Además de presentar el trabajo y las experiencia de estos dos fotoperiodistas, se incluye una pequeña muestra del trabajo que Pedro Valtierra también realizó como periodista gráfico en esta editorial, de 1977 a 1978; que van desde postales cotidianas hasta fotorreportajes que ocuparon la portada del diario.
La edición 172 de la revista Cuartoscuro corresponde a los meses Marzo-Mayo y coincide con la conmemoración de su 29 aniversario, así como con los 36 años de la agencia fotográfica del mismo nombre.
Más allá de las mujeres de X'oyep
Al término de la presentación de la revista Cuartoscuro, se dio pasó a la presentación del libro La mirada crítica del fotoperiodista Pedro Valtierra (2019) de la investigadora y periodista, Susana Rodríguez Aguilar.
Con la presencia de la coordinadora del Centro Queretano de la Imagen (CQI), Analí Núñez López, la autora habló acerca de esta publicación en la que aborda el relato visual que el fotógrafo mexicano realizó, creó y publicó en medios escritos de 1977 a 1986.
Para ello desarrolló una propuesta metodológica que le permitió analizar los contenidos informativos, estéticos, sociales e históricos de las casi tres mil fotografías que Pedro Valtierra tomó durante el periodo referido.
Finalmente, la autora reconoció que su objetivo principal fue demostrar que la fotografía es un documento que puede ser utilizado para estudiar a la sociedad desde diferentes ángulos, tomando en cuenta para ello la perspectiva de quien participa en dicha documentación.
“La fotografía es una fuente para la historia y eso es realmente lo que hago con la mirada crítica del fotorreportero Pedro Valtierra. Uso su fotografía para analizar la historia de un fotógrafo, pero también la historia de un periodo y de los medios donde trabajó (El Sol de México, unomásuno y La Jornada)”, afirmó la investigadora.
“Lo que quiero es destacar el aspecto social, cultural, económico, político de las fotografías de Pedro Valtierra; porque las imágenes nos ayudan a leer al fotógrafo pero también a la época en la que fueron tomadas; nos ayudan a leer los contextos en los cuales registró a los personajes (…) Cuáles fueron sus tomas, quiénes están integrados en sus fotografías, a quienes tomó y a quienes no. Hay que considerar que quienes no aparecen en ellas también son indicios de las fotos”, agregó.