A principios de este año, Proyecto Submarino se sumergía a explorar los terrenos de las bibliotecas digitales, además de la publicación de textos. Con el objetivo de generar un espacio ideal para las letras es que ahora abren un espacio de librería y biblioteca física en Burnout Records.
En entrevista con Joselo Montes, coordinador de este espacio, explica la naturaleza de este rincón bohemio en el que se encuentra desde Juan Villoro hasta Simone de Beauvoir; una colección de literatura queretana, una sección de libros de cine y música, entre otros.
¿Cómo fue que surgió esta idea?
En Proyecto Submarino tenemos una biblioteca digital, Sonart, donde la gente puede subir sus textos, los mandamos a un ilustrador y este le da un acompañamiento visual y lo publicamos. Eso hicimos desde enero. Posterior pensamos en la oportunidad de tener un espacio físico.
La idea no era tenerlos alfabéticamente, sino el tener un acercamiento distinto a la literatura; dividimos las biblioteca en temáticas como autores ricos, literatura adolescente, promesas literarias, clásicos, viajes tantos introspectivos, pero también diarios; literatura virgen, entre otros. Esto en la parte de la biblioteca.
¿Cuál fue la curaduría de esta parte?
Desde que se abrió el espacio, escritores, poetas venían a las diferentes actividades. La biblioteca son donaciones de ellos, textos con los que los escritores tienen una relación, era la idea.
¿Qué más encontramos en este espacio?
En la parte de la librería hay una sección de cine y música que fue curada por el dueño de Burnout Records, hay poesía, narrativa, autobiográficos y demás.
Por otro lado, hay una sección de literatura en general, para hacer esa curaduría, nos acercamos a los gestores culturales de la ciudad, directores de museos y demás para que nos compartieran los libros que más los han influido o que en general los han acercado a la literatura en general, la idea es que eso también pueda variar cada determinado tiempo para tener diferentes ofertas literarias.
¿Cuál es el compromiso con la literatura queretana?
Queremos también darle un lugar especial a la literatura queretana, darle un auge, darle un espacio. Hay cómo un boom literario muchos queretanos están ganando premios nacionales, están becados por el FONCA, se esta haciendo cosas increíbles.
La naturaleza en sí del proyecto es invitar a la gente a consumir nuevas letras; sí leer Rayuela y todos estos clásicos, pero también leer cosas contemporáneas con temas nuevos, demás.
Con esta combinación de librería y biblioteca, ¿cuál podríamos decir que es la vocación de este espacio?
La idea va a ser el crear un formato más íntimo donde los escritores quieran venir aquí a presentar su libro, el contacto cercano, hablar de literatura, armar una bohemia rica.
(…) La idea es que la gente pueda venir y leer o sí se los quiere llevar; sólo es necesario la inscripción, presentar una identificación oficial y comprobante de domicilio, los libros estarán en préstamo hasta un mes.
Que haya la venta de los libros locales como una diversidad de curadurías, que se vaya interviniendo por otras instituciones como Aeromoto, etc.