Las artes escénicas siempre han sido una pasión para Sebastián Zavalza, no importa si su participación es sobre los escenarios o tras bambalinas, con solo pertenecer a ese mundo le es más que suficiente. Por lo que, a pesar de haber estudiado una Licenciatura en Diseño Industrial con énfasis en Interiorismo, el arte de la escenografía fue la que terminó por robar su corazón y redirigir el curso de su vida en los últimos años.
“Fíjate que mi actividad extracurricular era el canto, así que mientras estudié la carrera en el Tecnológico de Monterrey estuve en el coro y formé parte del grupo de folclor como uno de los cantantes. Hubo un período en el que me ‘retiré’ del canto, pero me seguía apasionando estar sobre los escenarios y por azares del destino me invitaron a audicionar en una producción del musical de Chicas Pesadas que organizó la compañía Obertura. Por cuestiones de tiempo no pude formar parte del elenco pero les dije, ‘oigan, ¿ocupan un diseñador de escenografía?’, les interesó la idea y pasé a formar parte del staff como escenógrafo. De ahí me acerqué con el grupo de folclor de mi escuela y les pregunté si podía encargarme de su escenografía, aceptaron y así fue como comencé a enamorarme de esta labor”, relató Sebastián Zavalza en entrevista con Diario de Querétaro.
Sintiendo esta nueva inquietud, el diseñador se planteó continuar su preparación académica bajo esta disciplina. En el país, el estudio del Diseño Escénico de forma concreta solo se encuentra disponible en la Escuela Nacional de Arte Teatral o en la Universidad Nacional Autónoma de México, ambas opciones en la Ciudad de México; mientras que en nuestra entidad, la Universidad Autónoma de Querétaro ofrece la materia de Escenografía y Vestuario dentro del séptimo y octavo semestre de la Licenciatura en Actuación. Por este motivo fue que Sebastián consideró buscar opciones en el extranjero.
“En México, el Diseño Escenográfico es todavía algo muy nuevo. Los teatros tienden a preocuparse más en invertir por la calidad actoral que en los sets. Así que cuando empecé a encontrarle gusto a este arte dije, ‘me encanta, quiero vivir de esto, pero ¿dónde puedo encontrar que me paguen por ello?”, comentó el diseñador.
Desde hace tres años, Sebastián forma parte de la Maestría en Diseño Escénico de la Universidad Carnegie Mellon, ubicada en Pensilvania, Estados Unidos. En esta institución, el queretano ha tenido la oportunidad de sumergirse más a profundidad en el diseño escénico y por su preparación, recibió la oportunidad de representar a su Casa de Estudios, y a México, en la tercera edición del Programa Internacional de Escenografía organizado por Organización Internacional de Escenógrafos, Arquitectos y Técnicos de Teatro. Este año, el encuentro será del 26 de agosto al 8 de septiembre en Rumania.
“La temática de las propuestas siempre ha ido cambiando y en esta ocasión los diseños tenían que girar en torno a Ovidio, el poeta que fue exiliado de Roma y que fue sumamente conocido por las obras Arte de amar y Las metamorfosis. Por la naturaleza de la historia, yo buscaba representar la migración, la soledad, los diferentes significados que puede tener el agua y el exilio. La pieza artística contará con diferentes elementos de iluminación, bailarines y agua. Afortunadamente fui uno de los seleccionados para que sus propuestas sean fabricadas y expuestas durante el encuentro, tendré la oportunidad de explicar mi propuesta y dialogar con maestros de otras partes del mundo que nos van a asesorar y dar pláticas, por lo que será una experiencia sumamente enriquecedora”, añadió.
De acuerdo con Zavalza, es responsabilidad del diseñador escénico permitir que la audiencia pueda entender el lenguaje narrativo de la obra, sea en el teatro, cine o, inclusive, espectáculos en vivo. “Se puede presentar la misma historia un millón de veces, pero la creatividad del diseñador escenográfico es la que determinará el poder y la carga de significados que presente el set y la utilería. Nosotros somos el puente entre el público y el director, por lo que está en nuestras manos facilitar el entendimiento de las piezas”. Según tu testimonio, tiene que existir una completa armonía y sincronía entre los diseñadores y quienes llevan la dirección para que así, los proyectos escénicos puedan cumplir su objetivo.
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Como una meta a futuro, a él le encantaría participar dentro del equipo creativo de las ceremonias de apertura y de clausura de los Juegos Olímpicos y, a su vez, trabajar dentro de una producción de Broadway.
Además del musical de Chicas Pesadas, el diseñador ha colaborado en el montaje de los musicales de Matilda, Cabaret, El caballero del alba, You on the Moors Now y A little night music. Sus trabajos de diseño se extienden a otras áreas como con el diseño de interiores para las tiendas Bimba y Lola de Cancún, Playa del Carmen y la avenida Masaryk en la Ciudad de México. Pueden seguir su trayectoria a través de su sitio web: https://www.sebastianzavalza.com/.
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