La Catrina por fin ha vuelto a Querétaro. Tras dos años de ausencia, Erik De Luna revive su tradicional show en el Mesón de Cómicos de la Legua, para darle vida a su icónico personaje ahora desde el Cyberespacio.
El tan querido monólogo del actor queretano ha arrancado su temporada para este 2024, y no se trata de un montaje cualquiera, sino de la celebración de su 25 aniversario interpretando a este destacado personaje del folclor mexicano: la Flaca, la Parca, la Calaca, la Huesuda… La Catrina.
Para la construcción de su nuevo concepto, el actor encontró inspiración en los cementerios digitales, término utilizado para describir las redes sociales de personas que han fallecido pero que de alguna manera “permanecen” vivos desde la red. “Es la inmortalidad que tanto le aquejaba al ser humano desde el inicio de los tiempos”, describió Erik De Luna en una entrevista realizada con Diario de Querétaro.
De acuerdo a lo previamente señalado por el actor, gracias a la huella digital, es posible conocer los gustos, el humor, los lugares que frecuentaba y otras curiosidades de una persona difunta, aunque hayan pasado años desde que dejaron el plano terrenal.
Dentro de su obra habla de ellos como seres de luz, pero no desde la óptica espiritual; sino a los que surgen gracias a la tecnología y las redes sociales, como si la vida de una persona pudiera aplicar lo realizado por Lord Voldemort en la saga de Harry Potter y dividir su ‘alma’ en horrocruxes, aunque en este caso sería Facebook, Instagram, X y TikTok.
El monólogo comienza con un fragmento del espectáculo que creó el año pasado en homenaje a Josefa Ortiz de Domínguez, La Corregidora de Querétaro. En menos de quince minutos, el actor logra hacer un recorrido por la vida y obra de la heroína de la Independencia, desde sus años en el Colegio de las Vizcaínas hasta su participación en las tertulias y condena por participar en la Conspiración. De igual manera habla sobre los rumores que giran en torno a la mujer: si había o no tenido un romance con Ignacio Allende, o si habían sido taconazos o golpes a la pared, por mencionar algunas anécdotas históricas.
De Luna lleva al público por un recorrido de risas que se transforman en carcajadas, de chistes con picardía y condimentados con humor negro. Al terminar el acto histórico, comienza el desarrollo del concepto que preparó para este año y en el que explora la muerte en la era digital.
Visualmente, el actor busca representar lo que sería un Más Allá dentro del ciberespacio (que según sus palabras, sería la nada), por lo que de inicio a fin lo que más predomina es la oscuridad. Juegos de luces, hologramas, esferas plateadas y cambios de vestuario son otros factores que se hacen presentes a lo largo de la función.
Si bien, De Luna ininterrumpidamente ha buscado presentarle al público un concepto nuevo de La Catrina, en esta ocasión no dejó pasar la oportunidad de traer algunos de sus vestuarios pasados como el primer traje que usó en 1999, que era la evocación viviente de la Calavera inmortalizada por José Guadalupe Posada, o el de La Catrina Monarca, La Catrina Monja Coronada, La Catrina de Colores e inclusive La Catrina Doña Josefa, esto a modo de realizar un recorrido por 25 años de trayectoria.
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La temporada terminará el próximo 16 de noviembre. Todas las funciones serán de jueves a sábado a las 21:00 horas en el Mesón de Cómicos de la Legua, ubicado en la calle Guillermo Prieto #7, colonia Centro Histórico.
Los boletos tienen un costo de 500 pesos en localidades más cercanas al escenario y 300 pesos, las más lejanas. Las entradas se pueden adquirir de lunes a viernes de 8:30 a 14:30 horas en las oficinas de Cómicos, ubicada en Guillermo Prieto #3.
