"Lele y los hombres de humo", obra infantil sobre la cultura otomí, la migración y la pérdida de identidad

De acuerdo con el director y dramaturgo, Uriel Bravo, la puesta en escena recupera aspectos de la cultura ñañho y entreteje fragmentos de poemas que Fernando Pessoa escribió para las infancias

Andrea Elizondo / Diario de Querétaro

  · miércoles 7 de agosto de 2024

Foto: Miguel Cruz / Diario de Querétaro


En la estación del tren se hace presente el imperdible ruido de la locomotora “chucu chucu chucu chucu pompom chucu chucu chucu”, y eso puede significar solo una cosa: el tren está por avanzar. Este lugar es testigo de las despedidas, promesas de amor y el comienzo de nuevas aventuras, como en el caso de las pequeñas Lele y Dönxu, quienes han decidido conocer todo el mundo sin imaginar que en su travesía se encontrarán con seres extraños que tratarán de hacerlas olvidar sus orígenes.

Esa es la premisa de la obra Lele y los hombres de humo, producida por la compañía teatral Pulque y Peyote, la cual tendrá una breve temporada como parte del programa de Sábados Infantiles en el Centro Cultural Casa del Faldón. Sus funciones son de entrada gratuita y la cita es a las 17:00 horas los días 10, 17 y 24 de agosto.

En entrevista con Diario de Querétaro, Uriel Bravo, director escénico de la compañía y autor de la puesta en escena, compartió que para él, los dramaturgos deben poner temas sobre la mesa y dejar que el público haga con ellos lo que deseen; al menos, desde su experiencia personal, dice no considerarse como alguien aleccionador o que deba dar un mensaje a través del teatro, “para mensajes solo los párrocos”, menciona a son de broma. Sin embargo, a través de sus textos refleja temas sociales que le preocupan.

“Este proyecto nació pensando en la Antigua Estación del Ferrocarril, yo quería hacer un pequeño homenaje a los trenes y a las personas que emigran, así que dentro de la obra se toca el tema de la migración, la identidad queretana y también incorporo una inquietud personal sobre el proceso de la comercialización que se ha hecho con Lele, esta muñequita que es emblema del estado y ha llegado a diferentes lugares del mundo, pero el verdadero artesano ve una pequeña cantidad de remuneración por su trabajo de creación. Siento que se ha perdido el sentido ritual de la muñeca, porque antes era un símbolo del árbol genealógico en el que los niños aprendían que vienen de una madre y que al haber una madre, por ende hay una abuela, y así se va construyendo a la familia. En el proceso de comercialización, la propia mercadotecnia ha eliminado toda esta carga simbólica”, explicó.

Desde su estreno en el 2021, la obra ha tenido presentaciones esporádicas, comenta el director. Han realizado breves temporadas de entre cuatro y cinco funciones, pero su principal objetivo es llevarla a festivales para llegar a más audiencia.

Foto: Miguel Cruz / Diario de Querétaro

Pese a abordar temas que podrían considerarse complejos como la migración y pérdida de identidad, el dramaturgo considera pertinente que sean tópicos que se dialoguen con las infancias.

“Yo tengo dos niñas y ellas se criaron en el teatro, gracias a ellas aprendí a respetar a los niños. No creo que sean tontos y empresas como Disney se han encargado de que los creadores nos olvidemos de ello al promover contenidos que son muy ñoños y hasta estúpidos, al grado que nos han hecho pensar a los adultos que los niños son tontos, pero es todo lo contrario. Los niños son inteligentes y tienen una curiosidad por el mundo que es fascinante. Por esa misma razón esta puesta en escena no cuenta con una escenografía ilustrativa, sino que busco activar la imaginación de las infancias, aunque ya sean adultos, y que puedan construir sus propios paisajes desde la mente (...) Además, si yo a mi edad, me sigo inquietando por la migración, ¿acaso los niños, que también ven este fenómeno, no lo harán también?”.

➡️ Únete al canal de Diario de Querétaro en WhatsApp para no perderte la información más importante

Dentro de la dramaturgia, el director incorporó fragmentos de un poemario de Fernando Pessoa Poemas para crianças, en el que el autor portugués escribió a las infancias.

Uriel Bravo llegó a Querétaro a finales de los años noventa y desde entonces se ha desenvuelto dentro del mundo teatral en la entidad. Con la compañía Pulque y Peyote tiene más de una década trabajando de forma activa; sin embargo, al proyecto le anteceden otros dos. La gran parte de sus proyectos poseen un intenso trasfondo social que explora la reintegración del tejido social y de los procesos familiares. En Facebook puedes encontrarlos como “Escénica Pulque y Peyote teatro”.

Foto: Miguel Cruz / Diario de Querétaro