Gallos Blancos siguen sin poder ganar en este torneo, ahora no supieron aprovechar la superioridad numérica que tuvieron por más de 30 minutos en este encuentro y cayeron por marcador de 2 – 1 en el Estadio Azteca, ante un Cruz Azul que llegó con la presión de conseguir un triunfo a como diera lugar, para salir de los últimos lugares de la clasificación general.
La Máquina sólo se aprovechó de uno de los peores visitantes de la historia. Cruz Azul vivió una semana llena de tormento, con manifestaciones y protestas, pero encontró en los Gallos Blancos a la víctima perfecta para ponerle una pequeña pausa a su crisis. Con todo y un hombre menos por más de media hora, el Potro debutó con triunfo, le inyectó nueva sangre a su equipo y ha callado las críticas, al menos por ahora. 2-1 final.
El partido estuvo lleno de imprecisiones, fue un juego poco vistoso. La Máquina realizó varios cambios en su plantilla como la inclusión de jugadores con poca actividad como Shaggy Martínez y Jaiber Jiménez en la defensa. La doble delantera con Carneiro y Estrada también sorprendió. Esa fue la propuesta del Potro Gutiérrez en su partido debut, pero la falta de conjunción se notó en cada línea.
El dominio fue alterno, pero no hubo claridad a la hora de atacar. Sin opciones claras, mucho menos algo de peligro en las porterías, de inmediato se notó que en el campo estaban el penúltimo y último lugar del Apertura 2022.
Cuando menos se esperaba, el equipo celeste se adelantó en el marcador. Carneiro realizó una gran jugada personal por la derecha, se deshizo de varios defensores queretanos y metió un centro medido al área. Carlos Rotondi se levantó de forma solitaria y su testarazo cayó en la red. Los jugadores pedidos por el ex timonel Diego Aguirre respondieron. El festejo fue de desahogo total.
El equipo cementero se complicó solo en el complemento. Morales ingresó para ser solución, pero fue todo lo contrario. El chileno fue expulsado, dejó en desventaja a su equipo y tras un largo dominio, Querétaro emparejó. Aboagye sólo aprovechó.
Todo parecía un empate cantado, pero apareció la sangre cementera. Tabó recibió un pase perfecto de Lira y definió por encima de Aguerre. De esa forma hizo explotar a los pocos asistentes al Azteca. Cruz Azul volvió a ganar, el Potro debutó con victoria y le puso calma a la crisis.