La Lucha Libre, es un deporte que llama poderosamente la atención de niños, jóvenes y adultos, por la magia que envuelven a estos personajes, sobre todo los enmascarados, pues muchos de ellos representan a ídolos o se convierten en superhéroes, sin embargo, no todo es miel sobre hojuelas para los luchadores, pues es muy difícil vivir de lo que se gana en este bello deporte de manera profesional, si no se dedican al cien por ciento.
Uno de los luchadores más conocidos y con mayor experiencia dentro del pancracio queretano, Ursus contó para DIARIO DE QUERÉTARO lo difícil que es ser luchador profesional independiente, pues no cuentan con seguro de gastos médicos mayores y en ocasiones, tienen que buscar otra forma de ingreso, pues solo si te dedicas al cien por ciento a la lucha libre, puedes vivir de ella, aunque reconoció que si volviera a nacer, volvería a ser luchador.
“Mi nombre de luchador profesional es Ursus con 22 años como luchador profesional, soy alumno del profesor Tino Herrera, orgulloso y cien por ciento queretano. Yo creo que es el lado oscuro de la lucha libre (lo que gana un luchador), en mis inicios llegamos a ganar hasta 30 pesos, era muy complicado el poder salir, como es un deporte profesional, tú te sostienes bajo tus propios medios, no podemos tener el acercamiento con el gobierno para otorgarnos becas o salidas a otros lados, nos tenemos que sostener con nuestro propio sueldo de luchador, está muy saturado en los estados pero son vitrinas, forzosamente tienes que hacer esa inversión para poderte ver o mostrar en otras arenas, entonces cuando son los principios de un luchador, tienes que sostenerte tus viajes, tus alimentos, tus entrenamientos, pagar el gimnasio, los hoteles y pues invertir tu tiempo, porque no regresas con dinero, regresas más gastado”.
Este destacado luchador de nuestra entidad, reiteró que efectivamente la lucha libre te puede dar para vivir bien, sin embargo, se tiene que tomar como un empleo y dedicarse al cien por ciento a eso, algo que es muy complicado en el ámbito independiente, sobre todo con los luchadores que no son las grandes figuras e ídolos como en el caso de quienes incluso ya han estado en las empresas importantes del país.
“Definitivamente pasa a ser un empleo como cualquier otro, el dedicarnos a la lucha libre al cien por ciento por supuesto que requiere de preparación, de alimentación, de ir a entrenar, ahí prácticamente estás invirtiendo tus ocho horas y lo rematas el día que vas a trabajar, entonces si te da para vivir y vivir de una forma bien cuando te dedicas al cien por ciento. En esto y como en todo, tienes que esforzarte al cien, si quieres obtener algo de la lucha libre, tienes que entregar absolutamente todo, entregarte al cien por ciento, ser profesional y sobre todo tenerle mucho amor, cuando reúnes todos estos requisitos, la lucha libre te puede dar una vida decorosa. El hijo del Santo es uno de los considerados más caros, después de ahí va bajando, va escalonando, pero obviamente ellos te venden ese imán para llenar las arenas, pero, por ejemplo en el CMLL se maneja bajo un tabulador que van ganando por porcentaje de acuerdo a las entradas, si la arena está llena a todos les va muy bien, pero también corren ese riesgo de que hay poca gente y ganan poco, pero son empresas bien establecidas, nosotros los luchadores independientes manejamos una garantía estándar para que cuando nos contraten o donde quieran que nos contraten ya saben cuál va a ser nuestro sueldo”.
Otra de las dificultades a las que se enfrentan, es cuando sufren alguna lesión o un accidente en alguna función, pues las empresas solo están obligadas a brindarles los primeros auxilios y los traslados a algún hospital, pero de ahí en fuera, lo que se requiera de atención médica corre por cuenta de los propios luchadores, además, pocos son los que tienen un seguro de gastos médicos mayores, debido a lo elevados de los costos.
“Al momento de tener una licencia de luchador profesional, es bajo tu propio riesgo, ni siquiera la honorable comisión de lucha libre tiene nada que ver con las lesiones, inclusive en los eventos, si a ti te contratan como luchador y ese día de tu lucha tienes un accidente y requieres de cirugía, el promotor solamente está obligado a darte los primeros auxilios y el traslado a un hospital, después de ahí es tu problema, si hay seguros de gastos médicos mayores, pero precisamente por los riesgos, son muy caros y no cualquiera los tenemos. En mi caso si tengo un seguro de gastos médicos mayores, es caro por la cuestión del riesgo que llevas, las empresas lo que te otorgan son como ciertos beneficios, o un plus, para que seas un luchador exclusivo, pero al final de cuentas lo sigues pagando con tu trabajo”.
Al ser cuestionado sobre los luchadores que han fallecido en el encordado, este gladiador de nuestra entidad, señaló que para muchos es un anhelo morir en lo que más les apasiona, pero sin tomar en cuenta que dejan a su familia desamparada.
“Uno como luchador su máximo anhelo sería morir dentro de lo que te apasiona hacer, pero atrás de ello dejas a tu familia desamparada y no puedes catalogar una lucha más complicada que otra, hasta en el momento que subes a entrenar pones en riesgo tu vida”.
El gladiador manifestó que, para poder ingresar a una de las empresas de renombre de nuestro país, primero se tienen que dar a conocer y poco a poco ir escalando para poder destacar, aunque reconoció que, en el tema de los seguros de gastos médicos mayores y otras cuestiones, se dan gracias a los sindicatos y en ocasiones se pueden ver los frutos de lo que se ha invertido para llegar a ser estrellas.
“Para poder ingresar a una de esas empresas de renombre, como lo son Triple AAA o el Consejo Mundial de Lucha Libre (CMLL), pues primero tienes que darte a conocer dentro del deporte, ya perteneciendo a una empresa, hay que ir escalando a base de esfuerzo, de dedicación, pero sobre todo que la gente empiece a empujar tu nombre, que te empiecen a adoptar y ese es el principal requisito, ya después podría venir o tener ese derecho de exigir tú como profesional, a la empresa, y es cuando empiezas a negociar las garantías y empezar a recoger los frutos de lo que invertiste. Las empresas de renombre ya tienen algunos beneficios, el CMLL tiene un sindicato, obviamente ellos ya gozan de gastos médicos y te lo otorgan como empresa al ser exclusivo de ellos, los que somos luchadores independientes tenemos que contratar ese seguro de gastos médicos mayores por nuestra cuenta”.
Ursus además de luchar, tiene un negocio de comida, específicamente una pizzería, la cual le ha ayudado a sustentar su carrera como luchador, así como a su familia, pues reitero que en un empleo normal no se puede tener el tiempo para entrenar, ni los permisos para ir a luchar y menos ausentarse por varios días, por lo que muchos prefieren dedicarse a la lucha libre o tener un negocio propio.
“En lo personal, a pesar de que el negocio fue antes de ser profesional, definitivamente se lo achaco a que es gracias a la lucha libre, porque nosotros requerimos de mucha alimentación y sobre todo de mucho tiempo para prepararnos día a día, entonces en un empleo normal no te dan permiso para salir a entrenar, a luchar, no te dan permiso para que si no regresas en dos o tres días te digan “aquí está tu empleo”, yo me vi obligado a tener una forma de ingresos puesto que yo ya tenía tres hijos antes de debutar y tuve que buscar la mejor forma para sustentar tanto mis necesidades como la carrera de luchador que apenas era un principio, la verdad es algo muy complicado, pero yo corrí con la suerte gracias a dios, de establecer un negocio y que ese negocio me dio para iniciarme como luchador”.
