El Gallo nomás no puede, parecía que este partido estaba “a modo” para romper la maldición de visitante pero cuando ganaban 1-0 les dieron la vuelta y regresaron a las andadas, ya son 29 juegos y contando sin ganar de visita.
EL PARTIDO
La más clara por parte de los locales llegó gracias a un gran recurso del “Chimpa” Amador. Luego de un saque de banda ofensivo, el mediocampista ofensivo intentó una especia de chilena para sorprender a Washington Aguerre. Casi lo logró, pero el guardameta sudamericano estuvo siempre atento a la jugada y logró sacar el esférico.
El conjunto de Beñat San José no aprovechó tener la posesión del balón y las primeras opciones de peligro, por lo que lo pagaron caro. Cuando Gallos se sacudió la presión, sacaron buena renta de un tiro de esquina. Cobraron a primer poste y Jonathan Dos Santos entró desde atrás, remató ya sin marca y venció la cabaña de Vikonis, quien se quedó confiado de su zaga y nada pudo hacer.
Ya en la parte complementaria, y tras un fuerte regaño por parte de Beñat San José en el medio tiempo, los morados cambiaron la idea de juego y hasta la actitud. Bastaron unos minutos para que rindiera frutos. Primero, tras un abuena triangulación en el área de los queretanos, Iván Moreno le dejó el balón a Sanvezzo. El atacante controló en dos tiempos, pero no dejó caer el balón y remató de volea para igualar los cartones.
No pasaron ni dos minutos y el mismo juvenil, con antiguo paso en el América, puso adelante al equipo del estratega español. Le rompió la cintura a un defensor rival dentro del área, se acomodó a su pierna buena y metió un riflazo a primer poste que Aguerre no logró ni ver de la potencia. A sus 23 años, Moreno consiguió su primero gol en el máximo circuito del balompié nacional. El festejo fue acorde al momento, como si hubiera ganado las Copa del Mundo.
La polémica llegó al “Kraken” por una posible mano de Zavala, quien tenía pocos minutos en la cancha y comprometió el resultado. No hubo tiempo para más. Querétaro falló en tres minutos y lo pagaron caro, por lo que dejaron ir la oportunidad de meterse en puestos de reclasificación. Por su parte, ahora los dirigidos de Beñat San José pueden soñar a lo grande.