Torreón, Coahuila.- Mejor no pudo ser para Santos al festejar con el superliderato del Apertura el décimo aniversario del Territorio Santos Modelo, valiéndose de un mediocre Cruz Azul para sacar una victoria por 3-1 y así asegurar la cima una jornada antes de concluir la fase regular.
Los Guerreros de Guillermo Almada confirmaron una gran temporada con un buen partido y un merecido triunfo, mientras que Cruz Azul dijo ‘adiós’ a un nefasto torneo y lamentablemente para su afición se siguen acumulando campañas con más penas que gloria.
Los goles del triunfo lagunero fueron de Gerardo Arteaga al 30, Brian Lozano al 32 y Octavio Rivero al 86.
El partido
Con un lleno en el Corona, Santos y Cruz Azul salieron en pos del triunfo con diferentes objetivos, los laguneros para amarrar el primer lugar y de paso celebrar los 10 años de su nueva casa, mientras que los capitalinos se jugaban su última carta para mantenerse en la pelea por un lugar en la liguilla.
Siboldi y sus pupilos lo anticiparon desde su arribo a la comarca, meterse a la casa del líder no iba a ser nada fácil y lamentablemente para ellos así fue, pues, aunque intentaron jugarle de tú a tú, realmente fue poco lo que pudieron hacer y con desesperación y desencanto vieron esfumarse las posibilidades de estar en la ‘fiesta grande’.
Santos demostró por qué es el mejor local y con goles de Gerardo Arteaga al minuto 30 con tiro cruzado de zurda y Brian Lozano al 32 definiendo con parte interna del pie derecho, tomó ventaja 2-0 en el primer tiempo.
De ‘la máquina’ poco puede rescatarse en la primera mitad, siendo el más activo ‘Cabecita’ Rodríguez, pero sin trascender.
El complemento
Para Cruz Azul era ‘matar o morir’, por lo que salió con más ambición en la parte complementaria, adelantando líneas para buscar acercarse en el marcador.
Santos por su parte no se echó para atrás y mantuvo su apuesta ofensiva, tratando de aumentar la ventaja.
Al minuto 56 los cementeros ‘revivieron’ gracias al tanto de Igor Lichnovsky, ganando el zaguero por alto un centro en el cobro de una falta por banda derecha, conectando con la testa para vencer a Acevedo y poner el 2-1.
Enseguida vino un partido de ida y vuelta en el que ambos generaron oportunidades de peligro, por lo que se veía venir un gol más en la parte final.
Cuando Cruz Azul tocaba la puerta con mayor insistencia, se dio un contragolpe letal con el que Santos sentenció un triunfo por 3-1, metiendo Adrián Lozano un centro raso por sector izquierdo, atajando Corona a una mano, pero para su mala fortuna dejó la pelota franca para que llegara Rivero a empujar de zurda y así liquidar el partido.
