Freno y reversa, la Máquina se estancó en Querétaro. Camilo Sanvezzo y Marcel Ruiz fueron los encargados de parar al líder.
Tiago Volpi y Jesús Corona salieron con traje de superhéroes y evitaron incontables oportunidades. El empate era inevitable, sin embargo, en la agonía del juego, Gallos Blancos mostró los espolones, sacó de las vías a la Máquina y le provocaron una dolorosa caída.
El triunfo queretano llegó en gran momento, justo cuando necesitaban ganar para mantenerse en puestos de liguilla y así hacer bolas a los que vienen en la persecución.
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EL PARTIDO
La Máquina pisó La Corregidora con las calderas encendidas, todos los vagones se coordinaron y avanzaron con potencia. El “Piojo” Alvarado no tardó en pisar el área queretana, Roberto exigió a Volpi muy pronto.
El acoso celeste fue intenso, Édgar Méndez fue el siguiente en jalar del gatillo, el español tiró, sin embargo, la zaga albiazul bloqueó el disparo.
Corral, Mier, Pérez y Romo no tuvieron descanso, Elías, Méndez, Alvarado y Cauteruccio los atacaron una y otra vez.
La única forma de quitarse de encima a la Máquina fue con un cabezazo de Sanvezzo, el “Lobo” contactó el esférico, su remate iba a la red, pero Corona voló para salvar a la Máquina.
Esa respuesta queretana molestó a los celestes, Méndez volvió a pisar el corral albiazul y con un disparo en el área, estuvo cerca de vencer a Tiago; el portero brasileño salvó el error de Romo.
El juego se convirtió de ida y vuelta, Sanvezzo y Ruiz comenzaron a unirse para traspasar el muro celeste.
Gallos ya no dejó de enseñar los espolones, Jaime Gómez con un tiro cruzado se quedó cerca de marcar.
Camilo no se quedó atrás y con disparo que alcanzó a desviar Aguilar, volvió a generar peligro.
El público observó un juego agradable, abierto y con vértigo.
Antes de ir tomar un respiro Volpi dejó la mejor postal de la tarde; Cauteruccio cabeceó un balón en el área, el esférico iba a la red, pero Tiago se colocó la capa y voló de manera asombrosa.
Esa imagen dejó a todos boquiabiertos, el árbitro vio su reloj y mandó a todos a replantear su estrategia
EL COMPLEMENTO
Al volver al campo el equilibrio llegó, ambos equipos siguieron al frente, pero ya les fue más complicado llegar al área.
Rafael Puente no esperó más y decidió darle ingreso a Edson Puch, el andino corrió al frente junto a Sanvezzo.
Gallos mostró otra cara, su cresta volvió a brillar a pesar de las nubes.
Camilo cayó en el área, el brasileño esperó la entrada del VAR para que se señalara algo más, sin embargo, no sucedió.
La Máquina perdió potencia, pero Elías Hernández con un tiro de lejos estuvo cerca de anotar, su disparo pegó en el poste.
El juego de a poco volvió a abrirse, hubo más espacios. Puch a pase de Ruiz se quedó solo frente a Corona, Edson disparó sin fijarse y su tiro pegó en Corona.
La respuesta de Cruz Azul fue inmediata, Elías arrastró el balón por la banda, recortó al centro y tiró, su fogonazo iba otra vez a gol, pero Volpi hizo lo suyo.
Andrés Rentería y Everaldo Stum fueron los cambios de Caixinha y Rafa para la recta final del juego.
El reloj avanzó, el empate lucía inevitable, pero Sanvezzo tuvo el mejor premio a su esfuerzo y en la agonía del juego logró su aullido letal.
Cruz Azul bajó la guardia y Marcel Ruiz lo aprovechó para ampliar y sentenciar el juego.
Caixinha desesperado metió a Mena y Montoya, pero el tiempo se agotó. Alto a la Máquina.
