Cuando parecía que todo era calma después del veto a la Resistencia Albiazul, un nuevo problemón se le viene encima a Gallos Blancos pues durante el partido frente a Tigres los aficionados aventaron bombas de humo lo cual generó una multa de más de cien mil pesos y un segundo aviso de veto, el último antes de tomar cartas en el asunto por parte de la Federación Mexicana.
“Por un aficionado que aventó una bomba de humo acabamos de recibir una fuerte multa económica y un segundo aviso de veto, ya no hay otro aviso ya hay veto y vamos a la liguilla, sabemos que es responsabilidad de la tribuna que se vete o no se vete el estadio”, dijo Manuel Portilla, Director Ejecutivo de Gallos.
No sólo el estadio, el equipo, lo económico, la afición, sino los miles de empleos que genera el Club se verían afectados en caso de llegar a un veto al Corregidora, situación que preocupa en el Gallinero.
“Hay que decirle a la afición que eso no lo pueden hacer porque afecta al equipo y a ellos mismos, hicimos una campaña por el grito de puto, que a mí si me afecta y afecta al niño aficionado, al vendedor de alimentos, es a la boletera, es al taquillero, generamos alrededor de 2500 empleos de forma directa y alrededor de 6000 de forma indirecta y todos ellos se ven afectados”, afirmó.
DE VISITA TAMBIÉN
El comportamiento de los aficionados no sólo es en el Corregidora, sino que el Club también se vería afectado en caso de que el grupo de animación viaje a Guadalajara este fin de semana cuando Gallos visite a Chivas en la fecha 17 del torneo.
“El aviso de veto no sólo es en casa, también aplica en nuestra visita a Guadalajara, el grupo de animación no puede entrar a ningún estadio, la responsabilidad es de la afición y ponen en riesgo al Club y estamos tratando de hacerlos conscientes de que no pueden ir a Guadalajara como grupo de animación”, dijo.