Pumas lo consiguió. Dejó de lado la turbulencia de la que se habla que atraviesan y vencieron a Querétaro con una certera actuación de Juan Dinenno. Para Andrés Lillini, técnico interino, el mérito no es de él, sino de la institución, porque el proyecto no le pertenece a nadie sino al club, sea con Míchel, con su interinato o con el que la directiva nombre en próximos días.

“Estoy ayudando. En el Club somos una familia. Hoy, el triunfo de la primera de Pumas fue del club, realmente”, dijo el experimentado estratega. “Estoy para servir. Soy el director de fuerzas básicas y me trajeron para un proyecto, mismo que llevamos a cabo de una manera buena con creces, más allá de los precarios análisis que hacen algunos, que se vuelven hasta personales. Mientras pueda ayudar, ayudo. Hoy sólo es un primer triunfo, una primer fecha. Este equipo no se va a dar por vencido nunca y nosotros lo disfrutamos”, agregó.

El estratega interino manifestó que todos en la institución tuvieron un ánimo raro tras la sorpresa de la salida de Míchel González, su ex técnico. Sin embargo, destacó que nadie puede estar por encima del club, mentalidad con la que afrontaron los pocos días previos y el cotejo que ganaron ante Gallos Blancos.