El alcalde de Cuernavaca y ex jugador de futbol, CuauhtémocBlanco, replicó hoy con un “son envidias” a las críticas querecibió en redes sociales por viajar al Vaticano a un encuentrocon el Papa y para disputar el Partido por la Paz.

En entrevista con Notimex tras el cotejo celebrado en el EstadioOlímpico de Roma reconoció que ya está acostumbrado a loscuestionamientos, pero dijo que viajó a la capital italiana por“una buena causa”, y fue invitado por el Papa Francisco.

Blanco se sumó a varias figuras del balompié mundial comoDiego Armando Maradona, Juan Sebastián Verón, Francesco Totti,Ronaldinho, Hernán Crespo, Felipe Anderson y Cafú en lainiciativa benéfica que sirvió para recaudar fondos paraenfermos, niños y víctimas del reciente terremoto en Italia.

Por la tarde de este miércoles el grupo de jugadores, del cualformaron parte también los mexicanos Carlos Hermosillo y RafaelMárquez, fue recibido por Jorge Mario Bergoglio en la Casina PíoIV, un edificio ubicado en el corazón del Vaticano.

Cuando las fotos del alcalde comenzaron a circular a través delas redes sociales diversos internautas lo cuestionaron –inclusoduramente- por haber abandonado su labor en Cuernavaca para asistiral partido.

“Nada, siempre va a haber críticas, siempre las va a haber,son envidias. Como dije vine con gusto, invitado por el Papa peroya lo he dicho muchas veces: me pongo un traje de buzo y se meresbala. La próxima semana estaré trabajando para losciudadanos”, respondió Cuauhtémoc.

“Fue una gran experiencia estar ahí con el Papa, es algobonito, lo viví ilusionado. Gracias a Dios tuve el privilegio deestar ahí, me voy feliz, muy contento, vine a ver al PapaFrancisco y ahora nos volvemos a México”, agregó.

El futbolista vistió la camiseta blanca de la Liga por la Pazdurante el segundo tiempo del partido, al menos en una ocasiónhizo su famosa jugada “la cuauhtemiña” y en el minuto 21lanzó el centro que cabeceó Crespo para anotar el tercer gol desu equipo, que se impuso por 4-3.

Aseguró haber pasado “un rato agradable” con Maradona,Ronaldinho y Totti; todos ellos vistieron el 10 en sus casacas,aunque el número se repetía.

Al mismo tiempo, aprovechó para felicitar al club mexicanoAmérica por su centenario. “Extraño a los amigos, laconvivencia día a día con los compañeros”, reconoció.

Por otra parte, también en entrevista, Carlos Hermosillo sedijo satisfecho por la experiencia de jugar el Partido por la Paz,aunque aceptó que “no es lo mismo” después de 14 añosalejado de las canchas. “Hice lo que pude y lo hice con muchocariño”, explicó.

“Para mí fue muy grato, un partido histórico, tuve laoportunidad en un día de vivir algo que siempre soñé: estar conel Papa Francisco en una reunión privada y jugar un partido conestas grandes figuras en apoyo a la fundación Scholas, por losniños y por la paz, es una gran satisfacción”, abundó.

El resultado 4-3 con el que se impuso la Liga por la Paz, deblanco, por sobre el Equipo del Encuentro, de azul, pareció sersólo una excusa para el espectáculo en una fría noche romana yun estadio en gran parte vacío.

Rafael Márquez jugó todo el primer tiempo a favor de la Liga yHermosillo hizo lo propio en el segundo para el Equipo. Los golesfueron convertidos por Antonio Di Natale (minuto 1), FredericKanoute (5), Totti (22), Bojan Kirkie Peres (35), Crespo (66),Nicolás Burdisso (69) y Fernando Cavenaghi (79).

Entre otras cosas, por primera vez Maradona y su hijo, DiegoJr., compartieron un campo de juego luego de décadas en las cualesel “pibe de oro” negó su paternidad y después de una recientereconciliación.

Hacia el final del primer tiempo Maradona y Verón tuvieron unavistosa discusión sobre el campo de juego luego de un golpe delsegundo que hizo caer al primero.

La pelea no pasó a mayores y a su salida ambos evitaronreferirse al asunto: “No pasó nada”, dijo Verón. “Lo quepasó con Verón queda entre nosotros, no debo hablar de un jugadorque yo admiré muchísimo”, cortó Maradona.