Una de las temporadas más atractivas que se habían formado este año para un novillero en España, era la del mexicano Diego San Román, quien estaba enlistado para abrir campaña desde la primera feria española, pasando por todos los seriales de primer nivel como San Isidro, en Las Ventas de Madrid, y Sevilla, en la Real Maestranza. Pero también se hablaba de tomar la alternativa al final de la temporada española y regresar a México convertido en un flamante matador de toros.
No solo se cayeron los planes estrepitosamente, sino que también Diego tuvo que luchar contra el Coronavirus, ya que a su regreso de España, a mediados del mes pasado, dio positivo. Sus síntomas, que no eran lo bastante graves, le permitieron irse a casa y con todas las medidas sanitarias, a lado de su familia, San Román logró superar al virus.
Mentalmente no es algo que ayudará mucho luego de quedarse sin torear la temporada más ambiciosa que se había planteado para un mexicano, para colmo el Covid-19 tenía a Diego en la lona. Ya no era la campaña, sino luchar por su propia vida ante un toro inviable.
"Teníamos una temporada bastante estructurada, estaba anunciado en diferentes ferias y como mencionas, ya se estaba preparando lo de la alternativa. Por esta situación se vino todo abajo. En mi opinión, las cosas siempre pasan por algo y así como estamos dispuestos a perder la vida en el ruedo, de igual modo hay que enfrentar esta dura realidad, sabemos que será para bien. Estoy seguro que nos dejara muchas lecciones de vida", señaló el torero.
"Se logró combatir el virus, estamos vivos y eso es lo que cuenta. Estoy más fuerte que nunca, con los deseos hasta arriba para seguir mi camino", añadió Diego, quien estuvo bajo los cuidados médicos en su domicilio, y que gracias a la inmediata intervención, pudo superar el virus si mayor problema.
"Después de ver cómo se desmoronó la campa, toca volver a reestructurar todo y armar nuevamente un plan. No dejo de soñar y menos pierdo el animo, vamos a sacar partido de esta circunstancia para lograr el objetivo", mencionó.
-¿Anímicamente cómo estás?
"No te voy a mentir, en un principio anímicamente me afectó mucho, el golpe fue duro por qué, como te digo, iba a ser una d las mejores temporadas que se habían armado para un novillero. Tenía la alegría de partir plaza en Sevilla y Madrid, me hacían mucha ilusión y ya ni decir de la alternativa. Conforme han pasado los días lo he asimilado y he continuado con mi preparación, ya no para una alternativa en puerta, pues ese paso te lo da el estar toreando. En este caso, estar más tiempo en el campo, nos ayudará para estar mejor y afrontar lo que está por venir".
El parón en la carrera de Diego afectó drásticamente su desarrollo, ya que venía formando intensamente su técnica por la fuerte actividad que estaba teniendo con los triunfos que se generaban.
"La gente me estaba conociendo cada vez más, y estoy seguro que el comenzar no será igual, sino mucho mejor. Después de la tormenta viene la calma y este tiempo lo estoy aprovechando para mentalizarme y que se den cuenta que dejar de torear no me afectó, por el contrario, que quiero ser una figura del toreo. Estoy como león enjaulado, pero en cuanto habrán la jaula me voy a comer el mundo", subrayó.
Actualmente Diego se encuentra bien de salud. Ya quedo atrás el Coronavirus, "estoy con muchas ganas de vestir el terno. Sigo meditando y reflexionando como persona y como torero, no dejo de entrenar como su fuese a torear mañana, al final, los planes de Dios son los perfectos", puntualizó.