La velada vivida en Dodger Stadium quedará por siempre en la posteridad y es que el Juego 3 de la Serie Mundial entre los Dodgers de Los Ángeles y los Medias Rojas de Boston quebró varias marcas, convirtiéndose de inmediato en una batalla memorable.
Siete horas y 20 minutos de partido tuvo el encuentro más largo en la historia del Clásico de Otoño, superando uno que duró seis horas y 23 minutos. Los 18 episodios también superaron con creces las 14 entradas que hubo en 1916, 2005 y 2015.
Los únicos jugadores que no vieron acción en el maratónico duelo fueron los lanzadores Drew Pomeranz y Chris Sale por parte del Boston, mientras que del lado de Los Ángeles, Rich Hill y Hyun-jin Ryu se quedaron en la banca.
En total participaron 46 beisbolistas, dejando atrás el anterior récord de 43. De esos 46, fueron usados 18 lanzadores, nueva marca.
Además, se contó con la presencia de otro zurdo mexicano en la lomita por los Dodgers.
El sinaloense Julio Urías retiró sin daño el episodio 17, rememorando al “Toro” Fernando Valenzuela, quien ganó el Juego 3 de la Serie Mundial de 1981 ante los Yanquis de Nueva York.
Hoy se vuelven a medir en California, ¿se repetirá la jornada?