El acoso escolar, también conocido como bullying se define como “aquella situación donde hay constantes agresiones verbales, psicológicas o físicas con la intención de lastimar, dominar, atemorizar a otro niño”, de acuerdo con la maestra Carmen Danelia de la Peña Castro, jefa de Acompañamiento Estudiantil de Educación Básica y Media Superior de la Universidad Autónoma de Guadalajara (UAG),
Esta situación, no suele ser comentada por los menores que lo sufren ya sea por miedo, vergüenza e incluso por amenazas del o los agresores, por ello es importante que los padres de familia estén alertas del comportamiento de los niños.
¿Cómo identificar si mi hijo sufre bullying?
- Tiene cambios repentinos en su estado anímico o temperamental
- Suele evitar platicar de los temas escolares
- Tiene pesadillas constantes, terrores nocturnos y accidentes en la cama
- Malestares físicos como dolores de cabeza, estómago o algún otro malestar físico que logre evitar ir a la escuela
- Marcas o moretones
- Poco interés por las actividades escolares
- Comenta que hay un niño “mal portado” en la clase y no le agrada.
- Sus calificaciones escolares empiezan a bajar.
- Se pone irritable y agresivo.
- Llanto sin un motivo aparente
- Suele aislarse.
- Busca la manera para que lo cambien de salón o escuela.
- Menciona que se burlan de él.
- Presenta ansiedad por las noches o mañanas.
Cabe destacar que el acoso puede no ser la única causa de estas señales, pero que de presentarse deben ser investigadas y atendidas por los padres o tutores del infante.
¿Qué hacer si mi hijo sufre bullying?
Una vez confirmado el caso de acoso, es importante que se atienda por los padres o tutores del niño para buscar una solución. Carmen Danelia, especialista en el tema recomienda las siguientes acciones:
- Comunícate: Practica la escucha activa con tus hijos, crea la confianza para que comparta contigo sus problemas. Para esto evita las preguntas de Sí y No. Puedes usar: ¿Qué es lo que te gusta más de ir a la escuela?, ¿Qué te gustaría que cambiara de la escuela?, ¿Qué parte del día de la escuela es la que menos te gusta? Entre otras.
Acércate a la escuela: Es común que la institución no esté enterada del hecho, por lo tanto no se estén tomando medidas al respecto.
Respeta sus emociones: Lo que para ti puede ser no tan grave para él puede significar un problema muy grande, recuerda que requiere de tu apoyo y orientación.
Sé su figura de confianza: Recuérdales que pueden acudir a ti si necesitan ayuda, acompáñalos en el proceso y agradece siempre su confianza al acudir a ti.