A través de los años el ser humano ha sido capaz de diferentes creaciones en la ciencia, la belleza y el arte, sin embargo, por otro lado, también ha existido la maldad, el fanatismo e incluso la crueldad extrema, hoy te contamos de los seis castigos más crueles que han sido usados para torturar a las personas.
Despellejamiento. Como lo dice su nombre, este castigo consiste en usar cuchillos y herramientas para lentamente retirar la piel del culpable, el objetivo de este castigo no solo era la muerte, sino prolongar el sufrimiento, así los que lo realizaban eran expertos en mantener con vida a la víctima el mayor tiempo posible, con esto comenzaban con la piel de las piernas, después muslos y trasero, estas áreas se encuentran lejos de los órganos vitales, así esto aumentaba la probabilidad de que la víctima permaneciera en un dolor agonizante por más tiempo sin que llegara a desangrarse, esta era una forma de tortura efectiva cuando los torturadores querían obtener información. Resulta que una persona que es despellejada no muere al instante, sino que puede sobrevivir unos cuantos días. Fue un método que se usó por más de 100 años.
La rueda del despedazamiento. Esta forma de castigo consistía en atar al reo a un banco o a una cruz para que el verdugo usando una barra de hierro pudiera romper todos los huesos y articulaciones del condenado. La técnica que usaban los verdugos era sumamente importante ya que se buscaba evitar la muerte por un derrame interno, por esta razón no se golpeaba la cabeza, el objetivo de este primer paso era lograr que las extremidades pudieran ser dobladas y dislocadas para que después él se fuera colocado en una rueda de carro, con las articulaciones rotas las piernas se colocaban hacia arriba y los brazos se extendían a lo largo de la rueda, a continuación se elevaba la rueda con el condenado encima de ella, con eso era un dolor extremo pues las costillas también eran quebradas cortando la respiración y llevándolo así a un muerte lenta y dolorosa.
Empalamiento. En ese la víctima se atravesaba con una estaca. esta penetra su cuerpo por completo. El empalamiento era llevado a cabo con cuidado y precisión, se seleccionaba una estaca lo suficientemente larga para que el castigo fuera largo y doloroso, el verdugo experto evitaba dañar órganos vitales o arterias principales para evitar un sangrado masivo que pudiera llevar a una muerte rápida. A medida que la estaca se adentraba en el cuerpo se producían desgarros internos y un dolor indescriptible.
Potro. Consiste en un dispositivo de tortura en forma de mesa con correas que ataba al individuo a la mesa y con cadenas o cuerdas atadas en brazos y piernas, se estiraba su cuerpo gradualmente, aumentando la fuerza con dolor en las extremidades, el objetivo de esta tortura era desgarrar los músculos y ligamentos y tendones de la víctima provocando un dolor insoportable.
Auto de fe. Este era un evento público organizado por la inquisición donde se juzgaba y sentenciaba a los herejes y blasfemos, era una demostración de poder y control por parte de la iglesia. Los acusados eran llevados a una plaza pública, se montaba un escenario, los herejes y blasfemos eran exhibidos ante la multitud y se les obligaba a renunciar a sus creencias y confesar sus supuestos pecados en contra de la iglesia, la pena máxima era la muerte en la hoguera, los condenados eran atados a unos postes y se les prendía fuego lentamente.
➡️ Suscríbete a nuestro Newsletter y recibe las notas más relevantes en tu correo
Crucifixión. Implicaba fijar a la persona a una cruz de madera, los verdugos usaban cuerdas y clavos para sujetar piernas y manos del individuo dejándolo suspendido en el aire, esto provocaba que se fueran asfixiando poco a poco, estaban expuestos todo el día al sol y no les daban agua, no solo era un método de tortura sino de exhibición pública por días.