Mujeres de más de 30 años son propensas a padecer várices: IMSS 

El número de embarazos, uso de anticonceptivos y ropa ajustada a nivel del muslo y cadera también lo propician

Diario de Querétaro Online

  · viernes 15 de marzo de 2019

Los principales síntomas son pesadez en las piernas e hinchazón, en los casos más complicados, así cambio de coloración en la piel de la zona afectada. /Cortesía

Las mujeres mayores de 30 años de edad son las más propensas a padecer várices, esto en una proporción de dos a uno en comparación con los hombres, señaló el médico angiólogo adscrito al Hospital General Regional 1 del IMSS, Jesús Alejandro Armendáriz López, quien dijo que la obesidad, sedentarismo, antecedentes familiares y estar sentados o de pie por mucho tiempo, son factores que lo propician.

Señaló que existen factores de riesgo que afectan directamente a las mujeres, como los embarazos, el uso de anticonceptivos y el uso de ropa ajustada a nivel del muslo, a cadera o cintura.

“Los embarazos, entre más haya tenido la mujer, las probabilidades de padecer várices aumentan; el uso de hormonales como los anticonceptivos, así como el uso de ropa ajustada a nivel del muslo, cadera o cintura, ya que crean una especie de torniquete que favorece la insuficiencia venosa”, afirmó el especialista.

Señaló que las várices aparecen debido a una insuficiencia venosa crónica, esto se debe a la disfunción valvular; “todas las venas, tanto superficiales como profundas, tienen unas válvulas que están dispuestas en forma de flecha, y cuya función es evitar que la sangre se regrese, o sea que el flujo sea anterógrado en sentido al corazón, entonces cuando estas válvulas deja de funcionar adecuadamente, la sangre se acumula y la vena se dilata, provocando las várices”, señaló el doctor Armendáriz López.

Añadió que estas venas afectadas se presentan principalmente en las piernas y se pueden dividir en tres dependiendo de su tamaño: las telangiectaceas, que miden aproximadamente un milímetro y que tienen una apariencia como de arañita; las reticulares, entre uno y tres milímetros y por último las varicosas, que son más grandes y se pueden ver como abultamientos en la piel.

El especialista indicó que los principales síntomas son pesadez en las piernas e hinchazón, en los casos más complicados, cambio de coloración en la piel de la zona afectada, aparición de úlceras, dolor.

Destacó que el principal tratamiento para las várices es la compresión, “esta enfermedad no se cura, pero se puede detener su evolución, la principal recomendación es el uso de medias o calcetas de compresión graduada, las cuales están más ajustadas de la parte inferior y menos en la parte superior”.

Comentó, “Es importante hacer ejercicio, bajar de peso si la persona tiene sobrepeso u obesidad; estos tres cambios en el estilo de vida van a disminuir en mayor o menor medida la hipertensión venosa y de esta forma se va a controlar la enfermedad” .