Los hábitos alimenticios inadecuados pueden restar hasta entre 10 y 15 años de vida a las personas que padecen obesidad, en comparación con quienes llevan una nutrición balanceada.
De acuerdo a médicos del Instituto Mexicano del Seguro Social de Sonora, dejar de lado los buenos hábitos alimenticios es muy común a pesar de ser de vital importancia para mantener la salud y evitar complicaciones a largo plazo, de ahí que el Plato del bien comer, debe estar presente en las dietas regulares de la población, agregando por lo menos 30 minutos de ejercicio diario y así gozar de una vida plena y saludable.
La posibilidad de restar hasta 15 años en la vida de las personas, de debe a que las personas no cuidan lo que ingieren, por ello la importancia de combinar todos los grupos de alimentos, es decir; carne, pescado, pollo, vegetales, harinas, fibra y frutas de la temporada.
Una nutrición deficiente, está directamente asociada con enfermedades crónico-degenerativas como diabetes mellitus, hipertensión arterial, osteoporosis, cardiovasculares y oncológicas.
Todo esto, sin dejar de considerar a la obesidad infantil, que a largo plazo, es un importante predictor de morbilidad y mortalidad.
es importante resaltar que cada una de las comidas del día incluyan alimentos de los tres grupos del Plato del bien comer.
El primer grupo, está conformado por cereales y tubérculos que contienen proteínas de alto valor biológico, grasas (ácidos grasos esenciales) y vitaminas que brindan energía para tener fuerza y desarrollar las actividades diarias.
En el segundo grupo, están las leguminosas y productos de origen animal que dan al cuerpo las proteínas necesarias para reponer los diferentes tejidos y ayudan al crecimiento y desarrollo. Sin embargo, deben consumirse moderadamente.
El último de ellos, se integra por frutas y verduras, que deberían ser los más abundantes en la alimentación, ya que son la principal fuente de vitaminas y minerales que participan en el desarrollo y buen funcionamiento de todos los órganos.
Los azúcares y las grasas proporcionan energía concentrada, por lo que su consumo debe de ser en la menor cantidad posible, para evitar sobrepeso y obesidad.
Cada uno de los alimentos que se consumen a diario proporciona cierta cantidad de calorías que ayudan al organismo a tener la energía suficiente para realizar todo tipo de actividades.