Uno de los trastornos característicos del fin de año es el llamado “trastorno afectivo estacional” el cual, según la Organización Mundial de la Salud (OMS) es un subtipo de la depresión que se relaciona con los cambios de estación y el clima, además del cierre de ciclo de cada año, la pérdida de un ser querido, problemas familiares o duelo.
El trastorno afectivo estacional, también está asociado con la disminución de luz solar y afecta entre 4 y 8 por ciento de la población general, en una proporción de cuatro mujeres por un hombre.
Los síntomas generalmente se intensifican de manera lenta a finales del otoño y en los meses de invierno. En forma general son los mismos que se presentan con otras formas de depresión:
· Desesperanza
· Aumento del apetito con aumento de peso (la pérdida de peso es más común con otras formas de depresión)
· Aumento del sueño (el poco sueño es más común con otras formas de depresión)
· Menos energía y capacidad para concentrarse
· Pérdida de interés en el trabajo y otras actividades
· Movimientos lentos
· Aislamiento social
· Tristeza e irritabilidad
Las personas con mayor posibilidad de presentar depresión estacional son quienes tienen ya diagnosticada alguna enfermedad psicológica o trastorno bipolar, personas que viven solas, aisladas o son inestables emocionalmente.
Para reducir el riesgo se sugiere, entre otras cosas:
· Tomar baños de sol por periodos de 20 a 45 minutos diarios o cuando sea posible, o a la luz de lámparas que simulen la iluminación natural.
· Incrementar la actividad física con breves caminatas al exterior de la casa
· Si se tiene la costumbre de dormir de día, que sean siestas de menos de 20 minutos
· Alimentarse adecuadamente y evitar la ingesta de alcohol.
En este proceso, la familia juega un papel importante en la detección de la depresión, por lo que se aconseja tener una comunicación respetuosa, abierta, empática, clara y cercana, a fin de que las personas expresen sus emociones.
Asimismo, en caso de requerir ayuda, se sugiere marcar a la Línea de la Vida 800 911 2000, que está disponible las 24 horas los 365 días del año.
(Con información de la SESEQ)